El Secretario General de la Agrupación Municipal del PSOE de Roquetas de Mar y Senador, Juan Miguel Peña, dice que el alcalde y presidente provincial del PP, “Gabriel Amat, debería de explicar la relación de su Junta Local con Pedro Mena cuando era presidente de Sol y Arena”, toda vez que el expresidente de esta comunidad de regantes, Pedro Mena, era miembro de la Junta Directiva de este partido político en la localidad cuando ocurrieron los hechos denunciados y calificados por el Fiscal.
{mosimage}Y añade el Senador socialista que los concejales roqueteros, a los que por cierto les vamos a hacer caso e incluir en la querella criminal a los que formaron parte de la Junta de Gobierno que adjudicó el Teatro-Auditorio, deberían de “pedir perdón y ser humildes, por las acusaciones que se me hicieron sobre mi actuación en el conflicto de Sol y Arena, en la que tengo mi conciencia muy tranquila y sepan que fui uno de los impulsores de la Plataforma Democrática que interpuso la querella criminal al entonces presidente de esta Comunidad de Regantes, por lo que el Fiscal ha venido a darnos la razón a los agricultores que disentíamos y manteníamos ciertos criterios de discrepancia”.
Juan Miguel Peña advierte al alcalde roquetero que “el PSOE no va a mirar hacia otro lado ante cualquier sospecha, por nimia que sea, que pueda hacernos pensar que supondría la comisión de un presunto delito”, por lo que el presidente provincial del PP debería tener la valentía de explicarles a las roqueteras y a los roqueteros la influencia que ha tenido la Comunidad de Regantes “Sol y Arena” en su Junta Directiva Local con la presencia en ella del entonces presidente, Pedro Mena, por lo que caso de no responder a este interrogante “los ciudadanos vamos a entender que ha sido mucha y útil, y en este caso tendría también que decir algo el presidente regional Javier Arenas”.
El dirigente socialista afirma que una sanción ínfima de 30 euros, en una algarada en un conflicto de tanto calado y en el que los agricultores del Poniente almeriense comenzábamos a tener indicios de mala gestión en la Comunidad de Regantes, ha sido desproporcionadamente utilizada por el adversario político de manera vergonzosa, cuando el presidente de la Junta Directiva del PP de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, construyó un invernadero en una zona protegida del Paraje Natural “Puntas Entinas-Sabinar” y se apropió de una parte de Cañada Real siendo además concejal de Urbanismo, siendo vendido una vez alcanzada la Alcaldía de Roquetas de Mar. Asimismo, le pide al alcalde roquetero y presidente provincial del PP que explique la relación del expresidente de Sol y Arena con esta formación política, y si esos miles de euros que el Fiscal menciona han servido para financiar al Partido Popular.
El Senador socialista lamenta la intolerable intromisión en su intimidad personal que está padeciendo por parte del PP, al tiempo que ello induce a pensar la buena salud de que goza el PSOE en Roquetas de Mar especialmente, donde Gabriel Amat están campando a sus anchas como si el municipio fuese una república bananera y resguardado de sus conciudadanos por escoltas pagados por el dinero de todos los ciudadanos, asegurando que “yo jamás llevaré guardaespaldas en mi pueblo, tengo la conciencia tranquila y la seguridad me la ofrecen mis vecinos”. No es Gabriel Amat, precisamente, el político en el que reflejarse, y bien altisonantes han sido los epítetos con que han calificado su actuación política sus propios correligionarios, que son los que bien le conocen y saben del arte de hacer política que tiene, habiendo conseguido destrozar el PP en la provincia como está haciendo con Roquetas de Mar donde antes era la envidia por la calidad de vida que tenía y ahora se está conociendo por su marbellización.
Finalmente, Juan Miguel Peña le pide al alcalde de Roquetas de Mar y presidente provincial del PP, Gabriel Amat, que haga una valoración pública de la calificación que de los hechos acontecidos en la Comunidad de Regantes “Sol y Arena” ha hecho el Fiscal, y no esconda la cabeza bajo el ala como suele hacer cuando las circunstancias le son adversas, de ahí que le veamos como a Pinocho.