Investigadores de Australia han conseguido, por primera vez en el mundo, transmitir un mensaje en varias fracciones a una red de destinatarios por el procedimiento del teletransporte, utilizando la física cuántica.
Los resultados de los trabajos, los primeros en el mundo en
demostrar la posibilidad de dividir los datos secretos a través del
teletransporte mediante la física cuántica, se han publicado en el
último número de la revista «Physical Review Letters».
demostrar la posibilidad de dividir los datos secretos a través del
teletransporte mediante la física cuántica, se han publicado en el
último número de la revista «Physical Review Letters».
Los estudios han sido dirigidos por el estudiante australiano
Andrew Lance y por el investigador francés Thomas Symul del
Departamento de Óptica Cuántica de la Universidad de Canberra, en
colaboración con el profesor de la Universidad de Calgary (Canadá)
Barry Sanders.
Andrew Lance y por el investigador francés Thomas Symul del
Departamento de Óptica Cuántica de la Universidad de Canberra, en
colaboración con el profesor de la Universidad de Calgary (Canadá)
Barry Sanders.
Los investigadores indican que este descubrimiento tiene la
capacidad potencial de mejorar de manera significativa la seguridad
de sistemas informáticos en el mundo y es susceptible de suscitar el
interés del mundo de las finanzas y la defensa.
capacidad potencial de mejorar de manera significativa la seguridad
de sistemas informáticos en el mundo y es susceptible de suscitar el
interés del mundo de las finanzas y la defensa.
El teletransporte consiste en producir un mensaje, desintegrarlo y
luego reconstruirlo. Según la experiencia de los investigadores, el
mensaje, enviado a una red de receptores, es un sonido de alta
frecuencia, pero podrá ser un mensaje hablado y escrito. En 2002,
dos científicos de la Universidad de Canberra ya lograron
teletransportar informaciones utilizando un rayo láser.
luego reconstruirlo. Según la experiencia de los investigadores, el
mensaje, enviado a una red de receptores, es un sonido de alta
frecuencia, pero podrá ser un mensaje hablado y escrito. En 2002,
dos científicos de la Universidad de Canberra ya lograron
teletransportar informaciones utilizando un rayo láser.