La Nasa reconoce que cometió errores durante las comprobaciones de la seguridad del Discovery antes del lanzamiento y ahora estudia cómo hacer que la nave vuelva sin problemas. Mientras, los astronautas dedicaron el domingo a limpiar y equipar la Estación Espacial Internacional.
Las revisiones de seguridad previas no fueron bien hechas, admitió el jefe de la agencia espacial estadounidense. "Nuestra opinión era que todo estaba bien. Pero nos equivocamos", afirmó Michael Griffin, preguntado por la televisión NBC sobre los daños que parece haber sufrido el aislante térmico del Discovery por desprendimientos de material durante su despegue. Griffin dijo que hubo suerte de que el material que se desprendió del tanque externo del Discovery no provocara daños peores.
Un desprendimiento de material similar dañó el revestimiento térmico de la nave Columbia, que se desintegró el 1 de febrero de 2003 durante su vuelta a la Tierra, al recalentarse la nave por la fisura del despegue y no soportar la extrema temperatura alcanzada al atravesar la atmósfera terrestre. Murieron los siete astronautas. La Nasa suspendió sus vuelos para corregir el problema y los reinició con el lanzamiento del Discovery, el 26 de julio pasado.
Tras el incidente en el lanzamiento del Discovery, la agencia volvió a suspender nuevos vuelos hasta solucionar el problema. Por su parte, Paul Hill, director de vuelos de la Nasa, informó el domingo de que uno de los dos tripulantes que harán salidas espaciales en los próximos días -el japonés Soichi Noguchi o el estadounidense Stephen Robinson- podrían tener que intentar reparar las plaquetas aislantes dañadas.
Mientras, la tripulación del Discovery dedicó su quinto día en el espacio a sacar basura de la Estación Espacial Internacional y trasladarla a su nave. A su vez, llevaron material y agua de la nave a la Estación. Los astronautas hablaron con la televisión norteamericana Fox. La comandante del Discovery, Eileen Collins, manifestó su sorpresa por el desprendimiento de material aislante del transbordador.
"No voy a decir que podemos seguir volando de esta forma, porque sabemos que hay algo que necesita ser arreglado", añadió Collins, para quien la Nasa hizo bien en lanzar la nave con la información que tenía disponible, pese al error. "Estamos aprendiendo". Consultado sobre el potencial daño, Charlie Camarda dijo que ha analizado la superficie de la nave mediante grabaciones e inspecciones con láser durante dos días. "Parece haber muy poco daño, unos pequeños indicios de que podemos tener algunos pequeños (…) golpes en los bordes principales, que examinamos muy cuidadosamente".
"Todo indica que el vehículo parece estar en orden y que estamos bien para regresar a casa", opinó Camarda. La Nasa indicó que tras examinar los vídeos y fotografías de 90% del recubrimiento cerámico del transbordador, no encontró daños de consideración. Los expertos aún deben analizar las alas y el morro del Discovery. La Nasa anunció el sábado que el transbordador permanecerá un día más de lo previsto en órbita, por lo que está previsto que vuelva a Tierra el lunes 8 de agosto en vez del domingo 9.
Otra reparación
La Nasa está considerando enviar dos astronautas a un
paseo espacial no previsto a la panza del transbordador Discovery, para alisar las asperezas causadas a los paneles aislantes, dijeron el domingo responsables de la agencia espacial estadounidense Nasa.
Los encargados de la Nasa están preocupados porque dos trozos salientes de un material conocido como "relleno de fisura" podría sobrecalentar al Discovery cuando ingrese a la atmósfera terrestre para aterrizar.
El daño producido a los paneles aislantes fue la principal causa del desastre del Columbia – cuyos siete tripulantes murieron al estallar la nave – durante la última misión de un transbordador, hace más de dos años.
Una gran cantidad de relleno está metido entre los negros revestimientos cerámicos en la panza del transbordador, que soporta temperaturas de alrededor de 1.370 grados Celsius cuando la nave regresa a la atmósfera terrestre.
Hasta el momento, la Nasa ha aterrizado con éxito 112 misiones transbordadoras, a pesar de que en ocasiones el daño a los paneles aislantes era grande.
"El accidente del Columbia nos hizo dar cuenta que habíamos estado jugando a la ruleta rusa con las tripulaciones", dijo el subdirector del programa, Wayne Hale.
El daño en el Columbia fue causado por un pedazo de espuma aislante que se desprendió del tanque de combustible durante el lanzamiento y golpeó el ala de la nave. Tras el accidente, la Nasa adoptó nuevos procedimientos, se gastó mil millones de dólares en medidas de seguridad y construyó equipos para inspeccionar la nave mientras esté en órbita.
Con los nuevos instrumentos -que permiten obtener imágenes de posibles daños- los ingenieros conocen ahora los detalles precisos de cuál es la condición del transbordador en el espacio, algo que hasta esta misión era imposible.
Impacto de los fragmentos
Los directores de la misión recibirían el lunes un análisis de los rellenos utilizados y de su efecto cuando se exponga a altas temperaturas, así como posibles planes de reparación.
"En este momento estamos decidiendo si vamos a hacer algo", señaló Hale.
Las partes que sobresalen en el aislante térmico del Discovery no son resultado de los impactos de fragmentos de escombros. La Nasa está trabajando para mejorar la manera en que los rellenos se adhieren a la nave para evitar problemas futuros.
La agencia también tiene que solucionar la causa del accidente del Columbia: los fragmentos que caen del tanque de combustible y golpean la nave.
Varias partes de aislante se desprendieron del tanque del Discovery durante el lanzamiento, lo que ha llevado a la Nasa a volver a suspender los vuelos de transbordadores por tiempo indeterminado hasta solucionar el problema.
Con la próxima misión de un transbordador a la Estación Espacial Internacional suspendida hasta nuevo aviso, la Nasa ha prolongado un día la actual estancia del Discovery en el espacio, reprogramando su aterrizaje para el 8 de agosto.
El segundo paseo espacial de la misión, cuyo objetivo es reemplazar uno de los giroscopios de la estación, comenzaba a primera hora del lunes.