Mojácar fue convertido por el añorado alcalde Jacinto Alarcón en un centro turístico de ámbito peninsular, que no en vano fue sobreconocido como ‘La Ibiza peninsular’, para continuar siendo el principal centro turístico del Levante Almeriense por sus sucesores hasta la ex-comunista y actual alcaldesa del municipio por el PP, Rosa María Cano, quien lo ha abocado hacia su práctica desaparición del atractivo turístico al convertirlo en zona residencial.
El singular concepto político de Rosmary Cano le indujo a rehabilitar el edificio de El Mirador, que diera nombre hace 35 años a la emblemática columna de opinión que provocara el primer secuestro de un medio de comunicación en la Democracia, y cuya rehabilitación duerme ‘el sueño de los justos’ en total consonancia con la política del PP, ofreciendo una imagen desoladora, según la extendida opinión.