Los zapatos de colegio son una de las compras más importantes que debes hacer cada año para tus hijos. No solo deben ser bonitos y combinar con el uniforme, sino que también deben ser cómodos, resistentes y adecuados para el desarrollo de sus pies.
¿Qué tener en cuenta al comprar zapatos de colegio?
A la hora de comprar zapatos de colegio, hay varios aspectos que debes tener en cuenta:
- La talla: es fundamental que los zapatos se ajusten bien al pie de tu hijo, ni muy grandes ni muy pequeños. Para ello, puedes medir su pie con una cinta métrica o usar un medidor de calzado. Lo ideal es que haya un espacio de unos 5 mm entre el dedo más largo y la punta del zapato, y que el talón quede bien sujeto.
- El material: los zapatos de colegio deben estar hechos de materiales transpirables, flexibles y duraderos, como el cuero, la lona o el algodón. Evita los materiales sintéticos que puedan provocar sudoración, rozaduras o alergias.
- La suela: la suela debe ser antideslizante, ligera y con un buen agarre al suelo. Además, debe tener una forma anatómica que se adapte al arco del pie y una amortiguación adecuada para absorber los impactos.
- El diseño: los zapatos de colegio deben ser acordes con el uniforme y las normas del centro educativo. Por lo general, se recomiendan los colores neutros, como el negro, el azul marino o el marrón. También debes elegir un diseño que sea fácil de poner y quitar, con cierres de velcro, cordones o hebillas.
¿Qué tipos de zapatos de colegio hay?
Existen diferentes tipos de zapatos de colegio según el estilo, la forma y el uso que se les dé. Algunos de los más comunes son:
- Los deportivos: son los zapatos más versátiles y cómodos para los niños, ya que les permiten realizar todo tipo de actividades físicas y lúdicas. Suelen tener una suela gruesa y flexible, un refuerzo en la puntera y el talón, y un cierre de velcro o cordones. Puedes encontrarlos en diferentes colores y marcas.
- Los náuticos: son los zapatos más clásicos y elegantes para los niños, ideales para combinar con pantalones o faldas. Suelen estar hechos de cuero o lona, con una suela fina y plana, y un cierre de cordones o velcro. Puedes encontrarlos en colores como el azul marino, el marrón o el beige.
- Los mocasines: son los zapatos más sencillos y prácticos para los niños, ya que no tienen ningún tipo de cierre y se ponen fácilmente. Suelen estar hechos de cuero o tela, con una suela fina y plana, y un adorno en la parte delantera. Puedes encontrarlos en colores como el negro, el azul marino o el gris.
- Las merceditas: son los zapatos más femeninos y delicados para las niñas, perfectos para combinar con vestidos o faldas. Suelen estar hechos de cuero o tela, con una suela fina y plana, y un cierre de hebilla o velcro. Puedes encontrarlos en colores como el negro, el azul marino o el rojo.
¿Cómo cuidar los zapatos de colegio?
Para que los zapatos de colegio duren más y se mantengan en buen estado, es importante que los cuides adecuadamente. Algunos consejos que te damos son:
- Límpialos con frecuencia, usando un paño húmedo o un cepillo suave para quitar el polvo y la suciedad. Si están muy sucios, puedes usar un jabón neutro o un producto específico para el material.
- Sécalos al aire libre, evitando la exposición directa al sol o al calor. No los metas en la secadora ni los guardes mojados, ya que pueden deformarse o estropearse.
- Cámbiales las plantillas o las suelas si están desgastadas o rotas, ya que pueden afectar al confort y a la salud de los pies.
- Guárdalos en un lugar seco y ventilado, preferiblemente en una caja o una bolsa de tela. No los apiles ni los dobles, ya que pueden perder su forma original.
Esperamos que estos consejos te hayan sido útiles para elegir y cuidar los zapatos de colegio de tus hijos. Y tú, ¿qué tipo de zapatos prefieres para tus hijos? ¿Qué criterios usas para comprarlos? ¿Qué trucos usas para mantenerlos como nuevos?