Desde hace muchos años sufrimos la degradación paulatina de las dos vías principales existentes en Ejido Norte, la Calle Sierra Nevada y la Avenida Príncipes de España.
Estas calles son muy transitadas por todos los ejidenses sobre todo aquellos que tienen a sus hijos en edad escolar y que tienen que ir todos los días a llevarlos a estos centros situados en la Avenida, como son los colegios Diego Velázquez y Ramón y Cajal, así como el IES Murgi y el IES Fuentenueva.
Estas calles sufren continuamente el tránsito de camiones y grandes vehículos que también usan estas vías para llegar a los distintos comercios así como vehículos agrícolas, ya que es camino obligado para acudir a los invernaderos de la zona. Este tránsito produce gran cantidad de daños en el asfaltado de dichas vías creando gran cantidad de baches que el ayuntamiento continuamente rellena con zahorra o con asfalto, creando pequeños parches que duran muy poco.
Estas dos calles además son muy transitadas por todos los vecinos de Ejido Norte, y el acerado y los pasos de peatones no están bien cuidados desde hace mucho tiempo. Estos pasos de peatones están muy deteriorados y al mismo tiempo son insuficientes para tales calles, ponemos como ejemplo la situación de la Farmacia de Ejido Norte, negocio por el cual lucharon mucho los vecinos del barrio, y la cual no tiene un paso de peatones delante de la misma puerta, al mismo tiempo su acerado no es el correcto ya que no hay posibilidad de subir una silla de ruedas o carrito para bebes debido a que no hay el rebaje necesario en dicha acera. Además faltan aparcamientos por lo cual aparcan justo delante de la puerta dejando casi incomunicada a la Farmacia, teniendo que sortear los coches que se sitúan en la misma puerta.
La Calle Sierra Nevada en particular, además está mal diseñada ya que sus edificios no están alineados correctamente creando embudos que dificultan el tráfico en dicha calle, creando atascos y problemas de circulación. Además el badén que se encuentra justo antes del parque solo sirve para acumular agua de lluvia que rebasa a la acera cuando algún vehículo pasa por allí.