En cualquier ciudad del mundo se promociona su singularidad conservando lo que históricamente la ha caracterizado -singularizado-, pero en Almería y gracias a los señores que nos gobiernan, la singularidad se entiende de otra manera. ¿Qué tenemos una Plaza de la Catedral con una fuente y unos jardincitos preciosos?
Pues se cambia por una nueva singularidad resultante de un ejercicio de arquitectura moderna y se añade además un moderno edificio que irrumpe en la propia calzada y sustituye a la acera. Así ha sucedido y está sucediendo con otras céntricas plazas, lease Puerta de Purchena, Plaza de San Sebastián… lo último que he visto despaparecer ha sido la fuente de la Plaza de San Pedro.
El año que viene tendremos la ocasión de renovar a quienes gobiernan en Almería para que sigan singularizándola y pudiera ser que decidieran que para poner en valor La Alcazaba, nada mejor que construir unas cuantas torres de 40 ó 50 pisos de apartamentos y en lo que sobre, pues un hotel de lujo, o dos, si son pequeños.
Sería una estupenda forma de revalorizar un solar que lleva en ruinas mucho tiempo, así que informo a Don Luis Rogelio y a Don Juan que, si en las próximas elecciones siguen conservando el gobierno del Ayuntamiento de Almería, pueden contar con mi asesoramiento -convenientemente valorado-, para singularizar y poner en valor nuestra ciudad, pues como se puede comprobar, ideas singulares no me faltan.