Así lo explicó el portavoz del comité de huelga, el juez del Juzgado de Instrucción número 4 de Huelva, Javier Pérez Minaya, quien aseguró que la huelga, aunque esté convocada, "aún está en el aire" hasta la próxima asamblea de magistrados, la cual se celebrará el próximo lunes con el objetivo de analizar la situación e intentar integrar todas las posturas y crear una propuesta conjunta de todos los jueces.
Minaya indicó que, "si se tiene en cuenta el criterio al que se acoge el CGPJ para decidir sobre el derecho a manifestarse de los jueces, ningún ciudadano podría hacer huelga", aunque apuntó que era "previsible un acuerdo de este perfil".
Del mismo modo, destacó que el aspecto económico "no es el que ha motivado nuestra protesta y no es prioritario en la actual coyuntura de crisis económica global", sino por "la efectiva y urgente instauración de la nueva oficina judicial, con delimitación precisa de las funciones y las responsabilidades dentro del ámbito de la Administración de Justicia y la incorporación a los juzgados de las nuevas tecnologías".
Por otro lado, entre otras reivindicaciones se encuentran que el CGPJ "establezca la carga máxima de trabajo razonable que puede asumir cada órgano judicial, que en ningún caso debe ir unido al establecimiento de sistemas productivistas para la retribución de la actividad judicial"; la adecuación de los medios materiales ya que "en los pueblos no se puede trabajar", y que se respete "su independencia", a lo que añadió que son "constantes las injerencias de otros poderes".