El Parque de Bomberos de Almería no cierra nunca. Se trata, como muchos otros servicios públicos de emergencias, de un lugar donde se presta atención a la ciudadanía las 24 horas del día, los 365 días del año. En 2005, los especialistas que trabajan en la capital tuvieron que participar en 1.266 casos, en su mayoría incendios con 742 casos registrados.
Las cifras no hablan de la tragedia humana que puede haber detrás de una llamada al parque pero son bastante claras en lo que se refiere a la importancia de su labor. El equipo de bomberos formado por más de 90 personas se turna en grupos de unos 17 profesionales diarios en el parque –15 profesionales en extinción de incendios y labores de rescate y dos en la central–.
En 2005 desarrollaron 491 situaciones de salvamento. Los accidentes de tráfico en los que pasajeros o conductores quedan atrapados copan buena parte de este dato, aunque también habría que señalar las intervenciones en rescate de personas en las montañas o zonas rocosas de las playas almerienses.
Y es que el parque de bomberos de Almería no desempeña su labor sólo en la capital, sino que atendió a 20 municipios de la provincia. Aunque no es un servicio que estén obligados a prestar, a nadie se le puede negar “el derecho de ayuda”, como subrayó el suboficial del parque, Juan Moya, a IDEAL. De este modo, los especialistas almerienses dieron cobertura a numerosos municipios de la provincia, participando en 140 sucesos que se registraron durante el pasado año. También en este punto predominan los incendios –98 casos registrados– y los accidentes de tráfico –42 intervenciones contabilizadas–.
Municipios como el de Níjar; Huércal de Almería; Pechina; Benahadux o Viator se encuentran entre los que más trabajo dieron a los bomberos, quienes han llegado a acudir a socorrer a personas o a extinguir fuegos a Vera o a Carboneras. Enero del año pasado se convirtió en un mes de importantes actuaciones de los bomberos en Níjar, principalmente por accidentes de tráfico.
El miércoles fue el día de la semana en el que se registraron más incidentes en los que se requería la presencia de este Cuerpo. Afortunadamente no se produjeron sucesos en los hospitales almerienses aunque sí se registraron incendios en locales comerciales de la capital, dos de ellos durante el mes de agosto. Aunque todos los servicios presentan dificultades, destacan los que consisten en la descarcelación de heridos en el interior de vehículos o los incendios en naves de madera.
En estos casos es necesario sacar todo el material al exterior para ir apagándolo y prestar una especial atención a la estabilidad de la estructura de la nave, por si se hubiera visto afectada. “No se deja entrar a los bomberos cuando la estructura está fuertemente afectada sin unas condiciones de seguridad máximas”, sentenció Moya.
PROTOCOLOS DE ACTUACIÓN
El papel de los bomberos es fundamental ya que de ellos depende que se salve la vida de personas o que la llamas no se propaguen por las inmediaciones de la zona donde se encuentra el foco o en un edificio de pisos, por ejemplo. Conscientes de la dificultad y de la importancia de su labor, los especialistas cuentan con protocolos de actuación.
Así, en las ocasiones en que se declara un fuego en el interior de una vivienda se actúa con el despliegue más importante posible ya que hay que considerar el riesgo de que haya personas atrapadas en el interior del inmueble. En el vehículo de bomba urbana ligera viajan cuatro bomberos, un conductor y un mando; unos efectivos que se repiten en número en el camión nodriza, mientras que en vehículo de altura se trasladan otros dos bomberos y un conductor.
Los incendios en edificios implican, en palabras del propio Montoya, “mucho trabajo” porque, en general, “se trata de fuegos en la quinta, sexta o la séptima planta de un edificio” que hay que controlar lo antes posible. “Salvar la vida de una persona es nuestra recompensa” en estos casos, resaltó Moya, quien explicó que los especialistas se ven muy afectados a nivel emocional en aquellas ocasiones en las que saben que hay niños que pueden verse afectados por las llamas de un incendio.
Los bomberos hicieron 1.300 servicios en 2005
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