La concejala de Familia, Pilar Ortega, ha agradecido la confianza de las familias de los 37 niños que han disfrutado de distintas actividades de formación y ocio.
Una buena parte de los 37 niños y niñas, de entre 3 y 12 años, que durante los meses estivales han disfrutado de las actividades de la Escuela de Verano de los Centros Municipales de la Mujer se han despedido esta mañana con una fiesta celebrada en el centro de Cortijo Grande en la que ha participado la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Pilar Ortega, quien se ha felicitado por el éxito de la misma y ha agradecido a las familias “su confianza por dejarnos participar en la educación de los pequeños de cada casa”.
Desde el 26 de junio, los alumnos de la Escuela de Verano han podido vivir las vacaciones de una forma diferente, participando en numerosas actividades formativas, didácticas y de entretenimiento en las que se han tratado temas relacionados con la educación en valores, medio ambiente, cultura por la paz, manualidades, cuenta cuentos, refuerzo escolar, etc…, que se han compaginado con visitas, entre otras, al Centro de Interpretación Patrimonial, Parque de Bomberos, Museo de la Guitarra, Casco Histórico, Toyo Aventura, Ego Sport y, como es tradicional, han mantenido un encuentro con el alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, en el Salón de Plenos, quien, con mucho interés y grandes dosis de buena humor, respondió a preguntas relacionadas con el funcionamiento del Ayuntamiento, los proyectos de futuro que tiene para la ciudad y los niños, y también a otras más personales como si tiene o no mascota o dónde pasa sus vacaciones.
Además, la fiesta de despedida ha servido para conocer al ganador del concurso del diseño de la tarjeta con la que los Centros de la Mujer felicitarán la Navidad, cuyo afortunado ganador ha sido Alberto Lezcano, quien ha recibido un pequeño obsequio.
La Escuela de Verano de los Centros de la Mujer tiene como objetivo facilitar a las familias almerienses una solución ante la problemática de cada año en época estival, cuando los padres o tutores se ven obligados a continuar con su agenda laboral y los menores comienzan sus ansiadas vacaciones. Como novedad, este año ha contado con la ampliación del período de prestación del servicio, ya que hasta el año pasado aunque se iniciaba al acabar el periodo lectivo, acababa a mitad de agosto, pero ante la necesidad de cubrir por completo la época estival, se ha ampliado hasta el 8 de septiembre, con gran aceptación por parte de las familias almerienses.