La Asociación de Vecinos se reunió con Aránzazu Martín, responsable de la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible en Almería
La Asociación de Vecinos La Palmera se ha sentado a la mesa con la Junta de Andalucía para tratar el abandono que sufre el Cordel de la Campita. En la reunión mantenida con Aránzazu Martín, delegada almeriense de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, se plantearon los problemas que viene sufriendo el paraje desde su construcción por la Junta Andalucía en 2009 y que, pese a ello, sigue siendo muy visitado por los vecinos del barrio y demás almerienses que suben a pasear, hacer deporte y disfrutar de las vistas que ofrece su mirador.
Su coste fue de casi un millón de euros y la falta de entendimiento entre Ayuntamiento de Almería y la Junta de Andalucía están provocando un deterioro progresivo que amenaza su continuidad. La Junta lo construyó para que el Ayuntamiento lo mantuviese, pero el consistorio nunca lo recepcionó. Entonces el color político era diferente. Hoy, a pesar de que tanto gobierno autonómico como local pertenecen al Partido Popular, el Cordel de la Campita sigue abandonado a su suerte.
Los pocos árboles y plantas que han sobrevivido lo han hecho por mérito propio y con la ayuda de algunos vecinos. La situación hoy es caótica: el vallado se rompe y no se repara, el pavimento está muy deteriorado a causa de las lluvias, los parterres se caen por efecto de las inclemencias ambientales y las instalaciones deportivas e infantiles se deterioran y no se han reparado. Cuando la Asociación de Vecinos ha denunciado ante la administración el peligro que pueden suponer estas instalaciones, el organismo se limita a retirarlos, no a repararlos o sustituirlos. Por lo que lo que nada queda del Cordel que se construyó hace una década.
La falta de entendimiento entre administraciones, cuando no la poca voluntad de conservar espacios naturales no saturados de ladrillo, están en el fondo de este problema. La delegada de la Junta de Andalucía, Aránzazu Martín, argumentó que los problemas de presupuesto evitan que el ente autonómico se pueda hacer cargo del mantenimiento del Cordel. También asegura que ha llevado a cabo conversaciones con el Ayuntamiento de Almería, que no asume la competencia sobre el espacio, para intentar buscar una solución que por ahora no llega.
La comisión de la Asociación que asistió a la reunión volvió de ella con un compromiso muy débil por parte de Martín: enviar a la empresa que trabaja para la Junta a hacer un lavado de cara a la Campita, pero no la reparación de los elementos, ni del firme deteriorado, ni de la vegetación, ni por supuesto del sistema de riego; todo ello por falta de presupuesto. Tampoco se hará cargo del mantenimiento. El Cordel seguirá abandonado.