¿Te imaginas que vas a despedirte de un ser querido que ha fallecido y de repente descubres que está vivo? Eso es lo que le ocurrió a la hija de una mujer de 90 años en Zaragoza, que fue dada por muerta en el hospital y ‘revivió’ cuando estaba siendo preparada para el velatorio. Sin embargo, su resurrección fue breve, ya que horas después volvió a morir definitivamente. ¿Qué pasó realmente en este caso tan insólito? ¿Fue un milagro, un error médico o una combinación de ambos? En este artículo te contamos todos los detalles de esta historia que parece sacada de una película de suspense.
¿Qué ocurrió en el hospital?
La protagonista de esta historia se llamaba María Luisa y tenía 90 años. El pasado 18 de septiembre ingresó en el Hospital San Juan de Dios de Zaragoza por una insuficiencia respiratoria. Según el comunicado oficial del hospital, la mujer entró en “parada cardíaca constatada y sin posibilidad de reanimarla” sobre las 23:00 horas y los médicos certificaron su fallecimiento por causas naturales.
Los responsables del hospital avisaron a la hija de la fallecida, que se trasladó al centro para ver el cuerpo sin vida de su madre y realizar los trámites correspondientes para su traslado al tanatorio. Sin embargo, cuando llegó se encontró con la sorpresa de que su madre ya había sido llevada al mortuorio y los funcionarios estaban preparando la sala para el velatorio, que se iba a abrir al día siguiente.
¿Qué ocurrió en el tanatorio?
Fue en el tanatorio del cementerio de Torrero donde se produjo el hecho más sorprendente. El tanatopractor que se encargaba de preparar el cuerpo de María Luisa para el velatorio se dio cuenta de que la mujer aún respiraba. Según relató el propio trabajador, la mujer estaba colocada boca abajo en una mesa y notó que tenía “un leve movimiento respiratorio” y “un ligero pulso”. Ante esta situación, alertó al resto de empleados del tanatorio y activaron el protocolo correspondiente para volver a trasladar a la anciana al hospital.
Un equipo médico acudió al lugar y comprobó que efectivamente la mujer presentaba signos vitales. Así pues, sobre las 4:00 de la madrugada volvió a ingresar en el hospital, donde pasó a estar vigilada por los facultativos. “La paciente tenía una leve actividad cardíaca por lo que se le trasladó al hospital en situación de coma arreactivo, situación similar a la previa a la parada cardíaca y en situación de final de vida”, afirmó el hospital en su comunicado.
De nuevo, su hija fue avisada por el centro hospitalario, pero esta vez para informarle de que su madre había vuelto a ser ingresada porque estaba viva.
¿Qué ocurrió después?
Desgraciadamente, la alegría por el ‘milagro’ duró poco. María Luisa volvió a fallecer horas después en el hospital, sin haber recuperado la consciencia ni haber podido hablar con su familia. Según el hospital, la mujer murió por “un fallo multiorgánico irreversible” y no hubo posibilidad de reanimación.
Su hija expresó su indignación por lo ocurrido y anunció que presentaría una denuncia contra el hospital por negligencia médica. “No es normal que te digan que tu madre está muerta y luego te llamen para decirte que está viva”, declaró a los medios. Además, aseguró que su madre no tenía ninguna enfermedad terminal ni estaba sedada ni intubada cuando ingresó en el hospital.
Por su parte, el hospital defendió su actuación y aseguró que se siguieron todos los protocolos establecidos para certificar la muerte de la paciente. “El equipo médico que atendió a la paciente en todo momento actuó con la máxima profesionalidad y siguiendo los protocolos establecidos para la certificación de la defunción, que se realizó tras comprobar que no había actividad cardíaca ni respiratoria y que no había respuesta a ningún estímulo”, afirmó el hospital en su comunicado.
Asimismo, el hospital expresó su “pesar” por lo ocurrido y ofreció su “apoyo y colaboración” a la familia de la fallecida.
¿Qué explicación tiene este caso?
La historia de María Luisa no es la única que se ha registrado en el mundo de personas que ‘reviven’ después de haber sido dadas por muertas. De hecho, hay varios casos documentados de personas que han experimentado lo que se conoce como “síndrome de Lázaro”, un fenómeno muy raro que consiste en la recuperación espontánea de la circulación sanguínea después de haberse producido una parada cardíaca y haberse declarado la muerte clínica.
Según los expertos, este síndrome puede deberse a varios factores, como una hipotermia severa, una sobredosis de medicamentos, una estimulación eléctrica o mecánica del corazón o una reacción tardía a las maniobras de reanimación. Sin embargo, se trata de un fenómeno muy poco frecuente y muy difícil de predecir, ya que no hay ningún signo que indique que el corazón va a volver a latir después de haberse detenido.
En el caso de María Luisa, no se ha podido determinar con certeza qué causó su ‘resurrección’, pero se especula con la posibilidad de que tuviera algún tipo de arritmia cardíaca que dificultara la detección de su actividad cardíaca o que hubiera algún error en el electrocardiograma que se le realizó en el hospital. Sea como sea, se trata de un caso muy excepcional y muy impactante, tanto para la familia de la fallecida como para los profesionales sanitarios y funerarios que intervinieron.