ILTMO. DR. DON JOSÉ MARÍA MANUEL GARCÍA-OSUNA Y RODRÍGUEZ
-Historiador-Diplomado en Estudios Avanzados de Historia Antigua y Medieval y Médico-Familia de Atención Primaria.
-Académico-Correspondiente de la Real Academia de Medicina de Asturias (año-2013). RAMPA. IDE.
-Cofrade de Número de la Imperial Cofradía de Alfonso VII el Emperador de León y el Pendón de Baeza. (Creación año-1147)
-Socio de Número de la Asociación Española de Médicos Escritores y Artistas. ASEMEYA.
-Socio de Número de la Asociación de Hispanistas del BeNeLux.
-Historiador de HISTORIA-16.
-Académico-Correspondiente del Instituto de Estudios Históricos Bances y Valdés.
I.-INTRODUCCIÓN-
“Nacido en el siglo XIX, con una infancia triste, sin calor y jalonada por grandes sufrimientos, es el amanecer a la vida de uno de los últimos genios de la música. A lo largo de toda su existencia conocerá trágicos acontecimientos, que, cada vez más crueles, dejarán en él huellas imborrables. Gustavo Mahler está acosado por la idea de la muerte; esta idea le inspirará sus mejores composiciones. A pesar de su muerte prematura, su obra es inmensa. Persuadido de la misión que le incumbe, Mahler jamás hará concesiones en materia de música” (“Mahler”. Sylvie Dernoncourt. Espasa-Calpe; pág. 13; 1979).
-GUSTAV MAHLER-
II.-EL AÑO 1907.
En el mes de febrero de ese año, Gustav Mahler (Kalisté/Kalist, 7 de julio de 1860-Viena, 18 de mayo de 1911) dirigirá la reposición de la ópera La Walkyria de Richard Wagner (Leipzig, 22 de mayo de 1813-Venecia, 18 de mayo de 1911) en la Hofoper de Viena. A continuación llega a Brünn-Brno, donde dirige su genial 1ªSinfonía “Titán” en Re-Mayor (estrenada en Budapest en 1889). A continuación hace lo mismo con su Quinta Sinfonía en San Petersburgo.
Regresa ya a Viena para dirigir la ópera Ifigenia en Aulis/Iphigenia en Aulide de Christoph Willibald Gluck (Erasbach, 2 de julio de 1714-Viena, 15 de noviembre de 1787), estrenada por el nombrado Ritter/Caballero von Gluck en París el 19 de abril de 1774. El productor sería Alfred Roller (1864-1935); y ya no habría ya ningún tipo de colaboración entre ambos; ya que el compositor tiene unas lamentables relaciones con el superintendente de la Corte de Austria o Gran Chambelán llamado Alfred de Montenuevo (1854-1927).
En este encono se encuentra la causa por la que Mahler apoyará a Roller en el hecho de hacer ensayar y modificar la coreografía de los ballets, el maestro de ballet oficial de la Corte Imperial se sintió vejado y acudió a denunciar el hecho al príncipe de Montenuovo, buscando su ayuda. El chambelán imperial esperará el desquite, y la ocasión se presentará por causa de que el compositor se suele ausentar frecuentemente, para asistir a diversas invitaciones que se le realizan, con la finalidad de que dirija diversos espectáculos musicales por toda Europa.
Mahler está ahíto de tanto control, presentará su dimisión y sin esperar la respuesta burocrática a su petición de permisos múltiples, se dirigirá a Roma con su esposa Alma para dirigir tres conciertos ya programados. El viaje es sumamente accidentado, ya que el convoy sufre tres averías, y la pareja pierde sus maletas y todo su dinero. Las relaciones maritales entre los esposos se enconan, ya que el compositor está muy agotado físicamente y es muy egocéntrico, mientras que su joven esposa ya no desea seguir sacrificada totalmente a su autoritario y celebérrimo marido.
-ARNOLD SCHÖNBERG-
«Está harta de vivir fuera del mundo, de llevar siempre los mismos vestidos, mientras Mahler se viste en los mejores sastres, de verse obligada a impedir a las niñas hacer ruido mientras su padre trabaja en sus composiciones. A pesar de todo, Alma no puede desear otra cosa que estar cerca de él, a quien considera el centro de su vida. La pareja vuelve a Viena, estando enferma Alma. Durante su ausencia se han cometido indiscreciones en la Ópera y se ha desencadenado una verdadera campaña de prensa en pro o en contra –sobre todo en contra- de la dimisión de Mahler. Las cosas llegan a tal extremo que no hay más remedio que aceptar la dimisión del Director de la Ópera a partir del 31 de diciembre. El cese en sus tareas directoriales es el primer golpe del destino del año 1907» (Op. Cit.; S. Dernoncourt, pág. 92).
Tras regresar de Roma se encuentran a su hija pequeña enferma de escarlatina, Alma espera que la niña mejore de su enfermedad para poder someterse a una pequeña intervención quirúrgica. En Maiernigg, la otra hija, María, se enferma de difteria-C, por la bacteria Corynebacterium diphteriae o bacilo de Klebs-Löffler; esta patología era en ese momento histórico mortal de necesidad, y, desgraciadamente, el deceso de la niña se producirá el 5 de julio de 1907. El 7 de julio Alma sufre una taquicardia paroxística auricular muy importante, y se ve obligada a guardar reposo absoluto.
«“Mi mujer siempre tiene miedo por mi corazón. Hoy debe tener una alegría, pues bien lo necesita”. Pero en vez de una alegría, el diagnóstico del médico es trágico: “No tiene usted el menor motivo para sentirse orgulloso de su corazón”. Este diagnóstico lo confirma el médico de Mahler en Viena: el compositor padece una grave enfermedad cardíaca. Es el tercer golpe del destino que va a precipitar el final de Mahler. Cesantía, muerte y enfermedad, son los tres golpes de la suerte que se abaten sobre el compositor, como sobre el héroe de su ‘Sexta Sinfonía’» (Op. Cit.; S. Dernoncourt, págs. 92, y 93).
El matrimonio abandona Maiernigg y se traslada al Tirol para buscar consuelo a su pesadumbre; por orden médica no puede nadar ni andar en bicicleta. Para vencer su depresión realizará una gira por Rusia y por Finlandia, y aquí conocerá al gran compositor Jean Sibelius (Hämeenlinna, 8 de diciembre de 1865-Ainola, Järvenpää, 20 de septiembre de 1957).
Alfred el príncipe de Montenuovo, director de la Ópera de la Corte Imperial y Real de Austria, estaba desesperado, ya que nadie deseaba substituir en el puesto de director a Gustav Mahler; este se niega a ceder en sus prerrogativas, a causa de que ya tiene un contrato firmado para Norteamérica. Por todo lo que antecede, el 15 de octubre de 1907 dirige la representación de la ópera Fidelio-Op. 72 de Ludwig van Beethoven (Bonn, 16 de diciembre de 1770-Viena, 26 de marzo de 1827), en el teatro de la ópera de Viena. El 24 de noviembre dirige con la Wiener Philharmoniker su Segunda Sinfonía. En ambas ocasiones la presencia de público es casi nula.
-JEAN SIBELIUS-
Mahler ha perdido a gran parte de sus seguidores, que eran legión en estos pasados diez años. Escándalos y grandes éxitos se aúnan, pero sea como sea la Ópera de Viena está en el cenit de su prestigio, gracias a su esfuerzo, magisterio y genio inmarcesible.
III.-NUEVA YORK.
-ALEXANDER VON ZEMLINSKY-
«A los miembros de la Ópera imperial y real: ha llegado la hora de poner término a nuestras actividades comunes. Abandono un taller que me es muy querido, y no tengo más que deciros adiós. Detrás de mí dejo una obra no acabada, no terminada como había soñado, sino imperfecta e incompleta: tal es el destino del hombre. No me corresponde opinar sobre lo que mis actividades hayan podido proporcionar a quienes estaban destinadas. Séame permitido, sin embargo, en un momento tal, decir de mí mismo: mis intenciones eran honradas, mis objetivos elevados. El éxito no ha coronado siempre mis esfuerzos. El artista está sometido más que nadie a la resistencia de la materia, a la perfidia del objeto. A pesar de ello, me he entregado por completo, sacrificando mi persona a mi tarea, mis gustos al deber. No habiendo escatimado nada por mi parte, he podido exigir de los demás un esfuerzo excepcional y sin tregua. En el ardor del combate, en el fuego de la acción, no se han ahorrado golpes y heridas ni a ustedes ni a mí, pero si se conseguía una obra, si se resolvía un problema, se desvanecían trabajos y fatigas; nos sentíamos recompensados regiamente, incluso faltándonos toda señal exterior del éxito. Todos hemos progresado, y con nosotros la institución a la que dedicamos nuestros esfuerzos. Ustedes, que me han estimulado en una tarea difícil y a menudo ingrata, ustedes, que me han ayudado y sostenido en mi lucha, reciban de mí la gratitud más afectuosa. Acepten mis más sinceros votos por su porvenir personal y por la prosperidad de esta Ópera real cuyos destinos futuros seguiré siempre con el más vivo interés. Gustavo Mahler» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; págs. 95 y 96).
-RICHARD WAGNER-
Cuando el matrimonio parte en tren desde Viena, es despedido por diversos compositores como Alexander von Zemlinsky (Viena, 14 de octubre de 1872-Larchmont, 16 de marzo de 1942), y Arnold Schönberg (Leopoldstadt, Viena, 13 de septiembre de 1874-Los Ángeles, 13 de julio de 1951). Llegan a París, y embarcan en Cherburgo hasta Nueva York. El 21 de diciembre de 1907 ya ha sido contratado por el gerente del Metropolitan Opera House neoyorkino, llamado Heinrich Conried; su interpretación debuta con la ópera Tristan und Isolde de Wagner, y la misma es grandiosa; por ende la complicada crítica musical neoyorkina ya está conquistada. Pero, entre Gustav y Alma algo profundo se ha roto, ya que la muerte de su pequeña hija los ha alejado definitivamente.
«Mahler pasa días enteros acostado y no quiere que se pronuncie el nombre de la niña. Es un invierno terrible para la pareja. Alma tiene una debilidad cardiaca; Mahler olvida un poco su pena y su propia enfermedad para consagrarse a su mujer» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; pág. 96).
-RICHARD STRAUSS-
Sea como sea el triunfo profesional del maestro es indubitable. Se encuentra rodeado de grandes solistas vocales, tales como son: Enrico Caruso (1873-1921), y Fiódor Chaliapin (1873-1938), entre otros de mayor o menor enjundia. Mahler dirige varias óperas, verbigracia como La Walkyria y Sigfrido de Wagner, Fidelio de Beethoven, y el Don Giovanni de Wolfgang Amadeus Mozart (Salzburgo, 27 de enero de 1756-Viena, 5 de diciembre de 1791). Las puestas en escena provienen de la excepcional inventiva del director de escena Alfred Roller (1864-1935). Su único fracaso se produce en la ópera La Novia Vendida de Bedrich Smetana (Litomysl, 2 de marzo de 1824-Praga, 12 de mayo de 1884).
A continuación se dirigirá hasta Boston, la capital del estado de Massachusetts, y a Filadelfia, la ciudad de Pensilvania donde se elaboró la Declaración de Independencia y la Constitución de los Estados Unidos. Su estado físico está ya muy debilitado, por todo lo que le ha ido sucediendo en 1907; ha perdido parte de su habitual gran energía y ya no es tan exigente con los músicos de las orquestas que dirige, inclusive no protesta vehementemente como en el pasado, cuando se realizaban cortes argumentales en las óperas wagnerianas.
En abril de 1908 regresa a Europa, en mayo desembarcan en Cuxhaven-Hamburgo, para a continuación dirigirse a Wiesbaden, en donde el músico ya dirige. En Austria alquilan una casa de campo para poder pasar las vacaciones, la cual obtienen en el Tirol meridional, en Toblach. Aquí va a componer la Novena Sinfonía; y La Canción de la Tierra, que es una sinfonía para tenor, contralto o barítono y orquesta, la obra está basada en unos poemas chinos de los siglos VIII y IX, traducidos al alemán por Hans Bethge (1876-1946). La obra sería estrenada en Munich el 20 de noviembre de 1911, dirigida por Bruno Walter (1876-1962), en este momento Mahler ya había fallecido.
-ALBAN BERG-
En 1908 el matrimonio venderá su mansión de Maiernigg, y el desfile de amistades hasta Toblach es ingente. El 19 de septiembre de 1908 estrena, en Praga, su Séptima Sinfonía. Le acompañan en el concierto sus amigos los directores Bruno Walter, Otto Klemperer (1885-1973) y el compositor del dodecafonismo Alban Berg (Viena, 9 de febrero de 1885-Viena, 24 de diciembre de 1935). El recibimiento de la crítica fue muy tibio, a continuación la dirige en Munich, aquí con división de opiniones, y por todo ello decide volver a los Estados Unidos.
IV.-LA NOVENA SINFÓNIA.
Acompañados, asimismo, por su hija Ana se instalan en el hotel Savoy de New York. La grave enfermedad que padece Conried conlleva que sea substituido por el director del Teatro de La Scala de Milán, Giulio Gatti-Casazza (1869-1940). Este personaje autosuficiente exige, de forma taxativa, la contratación en el podio como segundo director de otro italiano llamado Arturo Toscanini (1867-1957).
En 1909 estrena y dirige Las Bodas de Fígaro KV. 492 de Mozart, y Fidelio de Beethoven, y repone Tristán e Isolda de Wagner; el triunfo global es memorable. La enconada rivalidad con Toscanini deja a Gustav Mahler sin fuerzas para seguir luchando. Se aparta del Metropolitan Opera House; y es contratado por una nueva orquesta sinfónica creada por un comité de damas de la alta sociedad neoyorkina.
«Mahler acepta la propuesta en el mes de abril; se ocupará del reclutamiento de los músicos y podrá efectuar giras de conciertos el año próximo. Es una inmensa alegría para él tener por fin una orquesta a su exclusiva disposición. Los Mahler se han acostumbrado pronto a la vida neoyorkina; tienen muchos amigos y salen y reciben muchas más visitas que en Viena. La salud de Mahler ha mejorado un poco» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; pags. 100 y 101).
En mayo de 1909, regresan a Europa, en París se encuentran con el padrastro (Karl Moll) de Alma, quien ha encargado un busto de su yerno al escultor Auguste Rodin (1840-1917). Aquí Mahler se reencuentra con sus amigos: los dreifusards o partidarios del capitán Alfred Dreyfuss (1859-1935).
En junio finaliza la composición de su Novena Sinfonía en Toblach; no podrá revisar, por falta de tiempo, la instrumentación de su obra, ya que antes de llegar a ello Mahler pasará a mejor vida. Se estima que esta magnífica obra es una especie de anuncio de su próxima muerte; algo patognomónico y prístino en un prototípico ciclotímico como es Gustav Mahler.
-ANTON BRUCKNER-
«Es la expresión de un amor inaudito a esta tierra, el deseo de vivir en ella en paz y gozar de la naturaleza hasta el límite y en toda su profundidad, antes de que llegue la muerte, que se aproxima irresistiblemente. Todo este tiempo descansa sobre el presentimiento de la muerte. Ahora y siempre, la muerte está presente» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; pág. 101).
El lenguaje musical de esta extraordinaria obra es total y absolutamente nuevo; es instrumental pura, posee cuatro movimientos (Andante Comodo; Scherzo; Rondó-Burlesco) y un genial Adagio, que conforman esta sinfonía. Cuando Mahler fallezca, la partitura será enviada, por Alma Mahler, al cuidado y dirección del gran Bruno Walter. Este la estrenará el 21 de junio de 1912 en Viena.
V.-NUEVO VIAJE A AMÉRICA. CRISIS MATRIMONIAL.
De nuevo, y ya por tercera ocasión, la pareja vuelve a los Estados Unidos de América del Norte; como necesitan dinero para los gastos corrientes del viaje, se ven obligados a vender su gran piso vienés. En el mes de septiembre de 1909, antes de embarcarse, Mahler dirigirá, por cuarta y última ocasión, su Séptima Sinfonía en Amsterdam. En América tiene ya contratados 45 conciertos, lo que le producirá pingües beneficios, estamos en la temporada de 1909 a 1910.
En Nueva York estará durante una semana, ya que dirigirá dos conciertos, en Manhattan y en Brooklyn. También realizará una gira de conciertos por otras ciudades, tales como: Buffalo, Springfield (capital del estado de Illinois), y en Filadelfia, la gran ciudad del estado de Pennsylvania, donde nació la revolución y la constitución de los norteamericanos contra Inglaterra. Mahler califica a la mediocre orquesta que le han asignado como de: “flemática y sin talento”. Pero, como no hay mal que por bien no venga, está muy feliz por no tener que dirigir demasiadas óperas. Únicamente, en marzo de 1910, dirigirá la ópera La Dame de Pique de Piotr Illich Tschaikowsky (Vótkinsk, 7 de mayo de 1840-San Petersburgo, 6 de noviembre de 1893), el recibimiento y la aceptación son muy mediocres.
-CLAUDE DEBUSSY-
En cambio, con la orquesta que le han confiado, va a dirigir diversas obras de: Johann Sebastian Bach (Eisenach, 31 de marzo de 1685-Leipzig, 28 de julio de 1750); de Franz Schubert (Himmelpfortgrund/Viena, 31 de enero de 1797-Viena, 19 de noviembre de 1828); de L. van Beethoven; de W. A. Mozart; de Richard Strauss (Munich, 11 de junio de 1864-Garmisch-Partenkirchen, 8 de septiembre de 1949); y de Felix Mendelssohn (Hamburgo, 3 de febrero de 1809-Leipzig, 4 de noviembre de 1847). Aunque no se olvida de dirigir el pleno de las sinfonías de su maestro Anton Bruckner (Ansfelden, 4 de septiembre de 1824-Viena, 11 de octubre de 1896); pero la gran complejidad de este material sinfónico no es recibido con excesivo entusiasmo.
Sus obras estarán representadas por los Kindertotenlieder y la Primera Sinfonía-Titán. En abril de 1910 regresarán a Europa. El 17 de abril, en el teatro Châtelet de París dirigirá su Segunda Sinfonía. El público la ovacionó sin reservas; mientras que los compositores Claude Debussy (Saint-Germain-en-Laye, 22 de agosto de 1862-París, 25 de marzo de 1918), Paul Dukas (París, 1 de octubre de 1865-París, 17 de mayo de 1935) y Gabriel Pierné (Metz, 16 de agosto de 1863-Ploujean/Morlaix, 17 de julio de 1937), abandonaron la sala de conciertos decepcionados, y ya en la mitad del 2º movimiento.
-WALTER GROPIUS-
El sinfonismo alemán tan grandioso y retorcido no será comprendido por los músicos cultos franceses. Al regresar a Toblach, Alma Mahler realizará una cura psiquiátrica en el balneario de Tobelbad. Será en este momento cuando Alma consiga enamorar al joven arquitecto Walter Gropius (1883-1969). La carta en la que le declara su amor, auténtica declaración de amores, será descubierta por el propio Gustav, el drama entre ambos esposos se desata.
«Alma confiesa a Mahler lo mucho que sufre por su egoísmo, por la dependencia a que él la somete, por el poco caso que hace de ella desde hace algún tiempo. Para él, es un choque espantoso; tiene celos de todo, exige verla y oírla respirar en cada momento del día. Tiene miedo de perderla y a menudo se derrumba sollozando. Incluso habla con Gropius y conmina a Alma a elegir entre los dos. Pero ella no se plantea siquiera la cuestión de abandonar a Mahler, aunque siente mucha simpatía por Gropius. Despide definitivamente a éste que no cesará de escribirle. Mahler se siente sin duda responsable pues va a Leyden, en Holanda, para consultar a Sigmund Freud. Vuelve un poco confortado por sus conversaciones con él. Sin embargo, el choque que ha recibido le causa un grave malestar cardíaco. Se recupera poco a poco y un día descubre los lieder compuestos por Alma y se da cuenta del error que cometió al prohibirle componer y le ordena que vuelva al trabajo. Pero una interrupción de diez años la ha incapacitado para la creación musical» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; Págs. 104 y 105).
Durante este trágico espacio de tiempo, Gustav Mahler comienza a componer su Décima Sinfonía, pero solo escribirá el Adagio. Alma indicará en 1924 que la obra debería haber tenido cinco movimientos. Será el musicólogo Deryck Cooke (1919-1976) quien completará la obra, ya que los estudios previos, ya escritos, realizados por el compositor sobre su obra han sido lo bastante completos como para finalizar la sinfonía. Alma dará su placet para su estreno, en Londres el 13 de agosto de 1964.
A finales del año 1910, la Universal Edition firmará un contrato con Mahler para la edición de todas sus sinfonías. Tras el gigantesco éxito obtenido, el 12 de septiembre de 1910, en Munich-München, con la ejecución de su Octava Sinfonía, que será la única obra dedicada a Alma, y que será bautizada como Sinfonía de los Mil; entonces recibirá una carta del Premio Nobel de Literatura Thomas Mann (1875-1955):
«Lo que yo podría darle a cambio de lo que he recibido de usted, pesaría como una pluma en la mano del hombre en quien creo reconocer la encarnación de la voluntad artística más profunda y más sagrada de nuestro tiempo» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; pág. 106).
-PAUL DUKAS-
Nuevamente, ahora en noviembre de 1910, regresará a los Estados Unidos de América, y ya por última vez. De los 65 conciertos contratados para la temporada 1910 a 1911, solo le será posible dirigir 48. Ya está muy fatigado; poco antes de las Navidades sufre una amigdalitis aguda acompañada de fiebre muy alta, casi una hipertermia (por encima de 40ºC). Comienza ya a estar muy ahíto del comportamiento del comité femenino que le ha contratado, y que está financiando la orquesta.
El 21 de febrero de 1911 está de nuevo enfermo de anginas/amigdalitis aguda, aunque no renuncia a dirigir el estreno mundial de la Berceuse auprés de la tombe de ma mère del compositor italiano Ferruccio Busoni (Émpoli, 1 de abril de 1866-Berlín, 27 de julio de 1924). A. Toscanini está presente cuando el compositor se desploma en el atril. Será ya su último concierto.
-FERRUCCIO BUSONI-
«A partir de entonces, comienza una larga enfermedad que durará tres meses. El estado de Mahler alterna entre una fiebre alta y algunas sensibles mejorías. Bromeando, busca el hombre con quien Alma pueda casarse si se queda viuda. Alma ha contado que se siente celoso de su futuro, como ella, al principio de su matrimonio, lo estaba de su pasado. Después de los análisis, se descubre que Mahler padece una angina estreptocócica. Se le aconseja volver a Europa a fin de consultar con alguno de los eminentes bacteriólogos del Viejo Continente. Alma, angustiada, hace venir de Viena a su madre para que le ayude. En abril, Mahler, que se ha negado a ir en camilla hasta el buque, embarca para Cherburgo con Alma, su madre y la pequeña Ana. Va en seguida a París en donde se siente de pronto mucho mejor e incluso hace proyectos para un viaje a Egipto» (Op. Cit.; S. Dernoncourt; págs. 107 a 108).
En Neuilly-sur-Seine se le realiza un tratamiento con suero fisiológico, por medio del profesor doctor Chantemesse. Desde Viena llega el profesor-doctor Chvostek, para ordenar su traslado urgente hasta el sanatorio Loew, sito en la capital-imperial austriaca. Las multitudes de sus seguidores exigen conocer noticias fidedignas sobre su estado de salud.
Cuando por fin le llegue su hora final, el 18 de mayo de 1911, solo articulará una palabra: “Mozart…”, y entregará su alma a Dios Todopoderoso; ya hacía mucho tiempo que, con toda decencia y dignidad, y sin la más mínima doble intención, se había convertido al cristianismo-católico; y ello le había permitido ser director titular de la Filarmónica de Viena y de la Ópera austriaca.
Funerales sencillos con asistencia multitudinaria. Será enterrado en el cementerio de Grinzing al lado de su querida hija María. Su sencilla lápida solo pondrá: “GUSTAV MAHLER”. Ya había dejado bien claro, cuando aún estaba vivo, que. “Los que me busquen ya saben quién era yo, los demás no tienen necesidad de saberlo”. Su manera de dirigir llamaba la atención, ya que era muy rica en amplios movimientos y muy agitados, con el paso del tiempo se fue afinando, y reduciendo sus movimientos a algunos ademanes de los dedos e indicaciones con los ojos.
La profecía del maestro se ha cumplido, cuando dijo: “Ya llegará mi tiempo…”. El diagnóstico vienés sobre la causa de su muerte fue el de una ENDOCARDITIS BACTERIANA ESTREPTOCÓCICA. Ya en 1907 le diagnosticaron una doble lesión valvular Aorto-Mitral de tipo reumático. La sepsis o infección generalizada incrementó la tragedia patológica de su fallecimiento.
-GUSTAV MAHLER-
-OBRA ESCOGIDA:
+PRIMERA SINFONÍA en Re-MAYOR, “TITÁN”. Compuesta en 1888. Y estrenada el 20 de noviembre de 1889 en el Vigadó Concert Hall de Budapest.
Sus movimientos son: 1º-Wie ein Naturlaut (Como un sonido de la naturaleza). 2º-Kräftig bewegt (Muy animado). 3º-Feierlich und gemessen, ohne zu schleppen (Solemne y mesurado sin arrastrar). 4º-Stürmisch bewegt (Muy agitado).
El propio Gustav Mahler escribe sobre su extraordinaria obra sinfónica a su amigo Fritz Löhr:
«Al principio constaba de cinco tiempos que más tarde se reducirán a cuatro, presentando la estructura de una sinfonía clásica. El orden de los tiempos es de lo más clásico; el primero es un allegro precedido de una introducción lenta, al que sucede un scherzo seguido de un tercer movimiento que hace las veces de tiempo lento. Un final agitado, que ocupa casi la mitad de la sinfonía, termina la obra. A pesar de su arquitectura clásica, esta Primera Sinfonía es una obra muy original que ya presenta numerosos aspectos del futuro lenguaje del Mahler sinfonista. Más que a un cambio de la forma, asistimos a una innovación en dos aspectos. Esta innovación se debe en principio a la orquestación que es de una riqueza, una minucia y una audacia inigualadas hasta entonces en el mundo sinfónico. Ni Wagner, ni Bruckner ni siquiera Ricardo Strauss, se habían atrevido todavía a emplear como aquí la madera cuadruplicada, cuatro trompetas, tres trombones y sobre todo ocho trompas, no doblando las tubas tenores como era costumbre hacerlo. Añadiendo a todo ello un segundo timbalero, címbalos turcos y un orfeón, Mahler nos ofrece efectos luminosos realmente sorprendentes. El segundo aspecto de la innovación reside en las reminiscencias populares y literarias. Con ocasión de las audiciones de la Primera Sinfonía en 1892 y 1894, apareció un programa detallado de la obra así como un título, ‘Titán’, que todavía se encuentran hoy, a pesar de que Mahler hubiera suprimido en 1896 tal título y tal programa. Sin embargo, es interesante conocer el contenido de dicho programa, por lo que lo citaremos sin perder de vista que Mahler lo escribió con la finalidad de ser perfectamente comprendido por sus oyentes, pero al que renunció por temor de que sus obras fuesen incluidas entre las de ‘música de programa’» (Op. Cit.; S. Dernoncourt, págs. 33 y 34).
-ALMA MAHLER-
-BIOGRAFÍAS DE GUSTAV MAHLER-
-MAHLER: Wolfgang Schreiber. Rowohlt. 1971/1983.
-MAHLER: Sylvie Dernoncourt. Espasa-Calpe. 1979.
-MAHLER: Marc Vignal. Editions du Seuil. 1966.
-GUSTAV MAHLER. ERINNERUNGEN UND BRIEFE: Alma Mahler. Bermann-Fischer Verlag. 1946.
-GUSTAV MAHLER: Richard Specht. Schuster und Loeffler. 1913.
-GUSTAV MAHLERS SINFONIEN: Paul Bekker. Schuster und Loeffler. 1921.
-LUDWIG VAN BEETHOVEN-
-CURRICULUM VITAE-
Del Instituto de Estudios Zamoranos “Florián de Ocampo”. (CSIC).
Del Ateneo de Valladolid (Creación año-1872).
Del Instituto de Estudios Gerundenses (CSIC).
De la Real Sociedad Arqueológica Tarraconense (CSIC).
Del Círculo Cultural Péndulo de Baza (UNESCO).
Del Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino (CSIC).
Del Centro de Estudios Benaventanos “Ledo del Pozo” (CSIC).
Del Centro de Estudios Fenicios y Púnicos (CSIC).
Del Centro de Estudios Históricos Jerezanos (CSIC).
Del Ateneo Jovellanos (Creación año-1953).
De la Sociedad Española de Estudios Clásicos (CSIC).
De la Asociación Hispania Nostra.
Asesor de la Asociación Cultural Reinos de España (FEAH).
De la Sociedad Española de Estudios Medievales (CSIC).
Del Instituto de Estudios Bercianos (CECEL/CSIC)
211Trabajos de HISTORIA publicados.
38 Biografías de Músicos de Música Académica publicadas.
106 Conferencias impartidas sobre Historia.
-LIBROS PUBLICADOS-
1.-EL GRAN REY ALFONSO VIII DE CASTILLA, “EL DE LAS NAVAS DE TOLOSA”. Editorial Alderabán/Alfonsípolis. 2012. Cuenca.
2.-BREVE HISTORIA DE FERNANDO “EL CATÓLICO”. Editorial Nowtilus. 2013. Madrid.
3.-EL REY ALFONSO X “EL SABIO” DE LEÓN Y DE CASTILLA. SU VIDA Y SU ÉPOCA. Editorial El Lobo Sapiens/El Forastero. 2017. León.
4.-EL REY ALFONSO VII “EL EMPERADOR” DE LEÓN. Editorial Cultural Norte. 2018. León.
5.-URRACA I DE LEÓN. PRIMERA REINA Y EMPERATRIZ DE EUROPA. Editorial El Lobo Sapiens/El Forastero. 2020. León.
6.-EL REY RAMIRO II “EL GRANDE” DE LEÓN. EL “INVICTO” DE SIMANCAS. Editorial Alderabán/Alfonsípolis. 2021. Cuenca.
7.-LA BATALLA DE LAS NAVAS DE TOLOSA. UN MITO EN LA HISTORIA DE LA RECONQUISTA. Editorial Cultural Norte. 2021. León.
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