Ante los conflictos surgidos entre residentes y locales de ocio en distintas zonas del municipio la solución pasa por la elaboración de un Pacto de Conciliación Ocio-Descanso.
Para María José López la administración local debe implicarse en un tema que está causando graves consecuencias a locales de ocio, vecinos y cómo no, a la imagen de nuestro municipio a nivel turístico y en los periodos más importantes del año, la época estival. El malestar es generalizado, en nuestro municipio, son muchos los locales de ocio repartidos por todo el término municipal, desde la Urbanización hasta Aguadulce y todos ellos muestran como característica en los meses de verano, las terrazas al aire libre y la multiplicación de dejas de los vecinos que residen en los edificios linderos.
Las molestias y ruidos son miles y variados, desde la música, recogida de las terrazas, más suciedad, ocupación de aceras, etc. y algunas de las zonas también son conocidas, Aguadulce, Chiringuitos, Camino de Torres, Paseo Marítimo del Puerto y en general cualquier local en el que se ronde la madrugada y permanezca abierto sin tener en cuenta que hay vecinos que tienen que trabajar al día siguiente. Pero, por otro lado, somos un municipio turístico, tenemos ferias y fiestas, fines de semana y puentes y una climatología que invita a disfrutar de las calles y las terrazas que nos ofrecen los locales ocio, tenemos una economía viva en torno al ocio, que ocupa a muchas familias y que se debe potenciar y cuidar para que siga creciendo y aumentando su empleo.
Por lo tanto, López Carmona, aboga por el diálogo como base que permita resolver los problemas, para ello hay que crear un ámbito donde éste diálogo pueda producirse, puede denominarse Mesa por el Ocio y el Descanso y que nos lleve a un Pacto de Conciliación del Ocio y el Descanso en nuestro municipio, donde además debe existir la figura del Mediador que ante los posibles conflictos que surjan busque los términos de encuentro entre vecinos y locales de manera que nunca se llegue a denuncias o situaciones irreversibles como las que se han dado en nuestro municipio.
Sentar en una misma mesa de trabajo representantes del sector, asociaciones, comunidades de vecinos, y locales, es el objetivo. Con ello conseguiremos, conciliar intereses y adquirir compromisos por ambas partes como: por un lado la tolerancia del vecindario y por otro las buenas prácticas profesionales, entre las que deben constar el control de decibelios en música, concienciar a los clientes en la necesidad de evitar el volumen alto de la voz en la vía urbana, recogida de las terrazas de forma silenciosa, la retirada de basuras en los horarios establecidos, limpieza del entorno, evitar la ocupación de la totalidad de las aceras por mesas y sillas, etc. y finalmente, la realización de campañas de concienciación para conciliar intereses de ambas partes.
Y, según María José López Carmona, para todo ello no hay tiempo que perder, por eso espera conseguir los apoyos suficientes para que su propuesta salga adelante y se empiece a trabajar a la mayor brevedad posible para evitar los conflictos que se han producido este año.