El Comité de Huelga de Aqualia, en Almería, niega las acusaciones de sabotaje realizadas por dicha empresa, concesionaria del servicio municipal de aguas, y manifiesta que, desde su comienzo la huelga se ha desarrollado de forma totalmente pacífica y sin ningún tipo de actuación que esté fuera de la ley.
Pues sólo se han dedicado a informar a la ciudadanía de sus reivindicaciones y a realizar concentraciones en las puertas de las instalaciones en la Pipa y en las oficinas de González Garbín.
Las incidencias en el funcionamiento del servicio, que la empresa Aqualia atribuye a acciones malintencionadas, no han sido, en ningún caso, provocadas por la huelga sino como consecuencia del deterioro de las instalaciones y de la falta de las necesarias inversiones de la empresa en su mantenimiento y renovación, circunstancias que los trabajadores llevan ya tiempo denunciando y que en casos como la limpieza de alcantarillas e imbornales incluso suponen un incumplimiento de las condiciones de la concesión.
Estas falsas acusaciones, atribuyendo a la huelga tanto las diferentes averías producidas como las molestias que éstas han producido a los ciudadanos, no son más que otra muestra de la mala fe de la empresa que tampoco respeta el acuerdo sobre los servicios mínimos. La actitud de la empresa paralizando durante un largo período la negociación del convenio colectivo ha forzado la convocatoria de esta huelga con la que, tras años de recortes y congelación, reivindicamos una subida salarial justa.
Ante esta situación, el Comité de Huelga manifiesta su deseo de que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado aclaren las denuncias realizadas por la empresa y reiteran que la huelga se está desarrollando de forma pacífica y dentro de los cauces legales. Desde FSP UGT Almería estamos expectantes, y nos reservamos el derecho a realizar las gestiones oportunas para denunciar judicialmente posibles falsas acusaciones.