Un total de 35 niños/as con discapacidades físicas, intelectual y sensorial muy severas de Almería y toda la provincia pasarán los meses de julio y agosto en la Escuela de Verano Avanzar, la cual se está llevando a cabo en las instalaciones adaptadas de la Residencia Escolar Madre de la Luz de la capital, desde el pasado 1 de julio.
La ‘Escuela de Verano’ es el único centro de estas características en Almería para niños/as con discapacidad gravemente afectados. Es gestionada por la FAAM, Federación Almeriense de Asociaciones de Personas con Discapacidad por quinto año consecutivo gracias a la subvención recibida por la Consejería de Empleo, la cual se enmarca en los proyectos de Interés General y Social. También se ha contado con la colaboración de la Delegación para la Igualdad y Bienestar Social y Educación.
En ella trabajan un total de 26 profesionales contratados por el SAE (Servicio Andaluz de Empleo): 20 cuidadores, 1 terapeuta ocupacional, 1 fisioterapeuta, 1 diplomado en enfermería, 1 coordinador, 1 conductor, 1 persona de apoyo.
La Delegada de Empleo, Francisca Pérez Laborda, ha explicado que “la Junta va a seguir apoyando este interesante proyecto que aúna dos de los objetivos de la administración andaluza: fomentar la creación de puestos de trabajo y promover la mejora de las condiciones de vida de las personas con discapacidad”.
El objetivo de este proyecto que este verano llega a su V edición es continuar con las habilidades que los niños han adquirido durante el curso escolar, y que éstas no se vean frenadas en los meses de verano. Además este proyecto supone un apoyo muy importante para las familias con niños/as con discapacidad. “Es sumamente importante que se vinculen programas de la Consejería para promover el empleo en personas con discapacidad y a la vez, éstas personas den un servicio cada vez más demandado a niños/as con necesidades educativas especiales. La escuela de verano Avanzar, supone una salida muy importante para los propios niños y sus familias ya que por sus necesidades no tienen cabida en las ofertas de ocio y tiempo libre habituales”, afirma Valentín Sola.
Los niños/as llegan a las instalaciones a las 9 de la mañana después de que el transporte adaptado de la FAAM los recoja a todos. A partir de esa hora y después del desayuno comienzan las actividades que se realizan durante toda la mañana y son de dos tipos:
• Asistenciales por las graves discapacidades que presentan los niños (fisioterapia, terapia ocupacional, psicomotricidad, asistencia sanitaria diaria)
• De ocio y tiempo libre: acuáticas, taller de artes plásticas.
A partir de las 13.00 horas los niños empiezan a comer menús elaborados teniendo en cuenta sus necesidades y carencias alimenticias. Después de la comida los niños son trasladados de vuelta a casa con el transporte adaptado a partir de las 15.00 horas.