El Mirador, el edificio desde cuya terraza a práctica línea superficial de la Plaza Nueva en el casco urbano de Mojácar, se desploma ante las miradas atónitas de las mojaqueras y los mojaqueros y pasividad rayana en la irresponsabilibidad de la Alcaldesa por el PP, Rosmary Cano, quien solo se ha atrevido a dar los primeros y sigilosos pasos para evacuar el emblemático edificio.
{youtube}MmOe4xGx3Lw{/youtube}
No hay un visitante que se precie de haber visitado Mojácar que no se acerque al mirador para divisar un extasiante e incomparable paisaje, mirador que fuera construido en la década de los 60 cuando comenzó a llegar a la localidad el turismo. Un edificio que podría tratarse del más emblemático del casco urbano civil de Mojácar, y que por la orografía del terreno en que se ubicó, por los materiales que se emplearon o la Alcaldesa sabrá la razón que le han dado sus técnicos municipales y una empresa foránea, se está cayendo, habiéndose aconsejado su cierre al público pero en este pueblo hoy en día, y enfrascada en su reelección se encuentra, no hay nada que se mueva o se haga que no pase por las manos de la todopoderosa Alcaldesa del Partido Popular y ex-edil del PSOE que con su transuguismo en la década de los 80 favoreciera la formación de un Equipo de Gobierno del PP, formación política en la que se ha asentado y que domina con la misma mano de hierro con la que gobierna la localidad.
Que El Mirador se cae no es una novedad para las mojaqueras y los mojaqueros, toda vez que es conocido que tuvo que ser remendado y reforzadas sus pilares. Ahora lo que ocurre es que la conversación monotemática en el casco urbano histórico de Mojácar es que “El Mirador se cae”, y ello ha surgido con profundidad e intensidads desde que hace unas fechas se evacuara la Biblioteca Pública Municipal que allí se había ubicado junto a la Escuela de Hostelería, que por cierto va a pasar a Almería ya que se ha evacuado también y no hay espacio en la localidad para su reubicación.
En el mismo edificio existe una Oficina Municipal de Turismo y la oficina-jefatura de la policía Local. Todo ello se tendrá que evacuar también ante la posibilidad cierta de que el edificio se venga abajo por la fortísima aluminosis que padece su estructura.
Una pista de la gravedad que existe es que ante las Fiestas de Moros y Cristianos que se celebraron a mediados del pasado mes de junio hubo que taponar las fisuras que se habían producido en uno de los escalones de acceso desde la Plaza Nueva a la terraza de El Mirador, como también las entrada al acceso por las oficinas de la Policía Local.
Se aduce el momento en que se encuentra Mojácar, donde el primer sector productivo es el turismo y que al haberse detectado el estado real ante el verano, al parecer, es la razón que aducen fuentes políticas municipales para mantener abierto el edificio, cuando lo aconsejable sería cerrarlo al público y también la carretera que junto a él discurre, pero corresponde a la Alcaldesa su determinación.