El Ayuntamiento de Berja (Almería) ha adquirido dos cámaras de paso digitales para sumarlas al operativo técnico que continúa activo en el parque periurbano de Castala en busca de indicios que permitan ubicar al gran felino negro que obligó a cerrar el paraje durante casi dos semanas y seguir el rastro del animal, que, según testimonios de los vecinos que dicen haberlo visto, respondía a las características de una pantera.
El alcalde virgitano, Antonio Torres, ha indicado en declaraciones a Europa Press que las dos nuevas cámaras, que se añaden a las diez instaladas por la Consejería andaluza de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, pretenden mejorar la “eficacia” del dispositivo ya que las cámaras que ahora están funcionando “son antiguas, analógicas y, por tanto, de carrete”.
“Tenemos constancia de que han captado imágenes a lo largo del fin de semana pero no vas a extraer el carrete y revelarlo por seis o siete fotos cuando es de 40 ó 50”, ha trasladado Torres, quien ha detallado que la inversión realizada por el Consistorio es de “alrededor de 200 euros por unidad”.
Con la instalación de las cámaras de paso digitales y toma de imágenes con baja luminosidad, a la que están procediendo en la tarde de este lunes en el entorno de Castala en el que se ha avistado al gran felino negro en un mayor número de ocasiones, el regidor espera “qué podamos analizar al momento qué animal ha provocado que salte el dispositivo e identificar de qué clase de felino estamos hablando”.
El mando del operativo resolvió el pasado viernes retirar al personal de Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y de Medio Ambiente que se mantenía desplegado en la zona desde el 20 de agosto y duplicar los medios técnicos instalados en el entorno a la espera de tomar imágenes del esquivo animal.
La decisión se adoptó tras una reunión para analizar los indicios y pruebas recogidas hasta ahora y que, de momento, no han revelado a presencia “a ciencia cierta” del animal en este paraje natural del municipio virgitano. en esta reunión se acordó, asimismo, instalar cinco nuevas cámaras de paso en lugares estratégicos del parque y de su entorno, que se suman a las cinco ya habilitadas.
En caso de que se recojan pruebas que certifiquen que el gran felino negro retomará el operativo para su captura vivo mediante un rifle anestésico que lo dormiría y permitiría su posterior traslado a un zoológico del municipio de Tabernas, cuyos propietarios han ofrecido colaboración para acogerlo.
ASESORAMIENTO DE UN PROFESIONAL
Las últimas novedades en el operativo se producían tres días antes de que se modificara el operativo con el avistamiento del animal por parte de dos ciclistas que transitaban por el parque. Ambos testimonios detallaron que el gran felino negro se había “cruzado a su paso” en el mismo punto en el que habría sido visto el pasado viernes por dos agricultores, quienes circulaban en tractor y a los que “se les puso al lado”.
El Ayuntamiento, en coordinación con el puesto de mando, decidió, asimismo, a contactar y pedir asesoramiento a un profesional “especialista” en este tipo de fauna para que orientase en el rastreo del animal. Su incorporación se produjo y estuvo colaborando con los efectivos desplazados.
Las cámaras de paso habilitadas junto a las jaulas-trampa con cebo como reclamo y en las inmediaciones de fuentes naturales de agua no consiguieron captar la imagen del animal, si se recogieron “huellas” que finalmente no han dado un resultado “positivo y concluyente”.
El operativo estuvo integrado por tres miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y tres agentes de Medio Ambiente y la búsqueda se llegó a extender en un perímetro de unas 500 hectáreas en el entorno del parque de Castala y en la vertiente sur de la Sierra de Gádor, en el término municipal de Berja.
Según indicó en su momento el alcalde de Berja, el primer avistamiento del animal se produjo a principios de agosto por parte de un vecino que caminaba por la zona si bien, ante el temor de que se le tomara “por loco”, no puso el hecho en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad dos semanas después.
La operación búsqueda y captura de la pantera supuestamente visualizada en el parque Castala de Berja ha sido abandonada casi a las dos semanas de iniciada la operación, con lo que la sospecha que tenía el pasado sábado la Delegación Provincial de Agricultura y Medio Ambiente de que no existiera tal felino en esta zona se confirma, algo que ha supuesto la segunda ocasión en que se ha producido este caso ya que hace unos años ocurrió exactamente igual aunque sin la alarma social que ahora se ha producido.
El mando del operativo activado hace casi dos semanas para capturar con vida al “gran felino negro” que varios testimonios ciudadanos informaron haber visto en el parque periurbano de Castala, en Berja (Almería), ha resuelto retirar al personal de Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y de Medio Ambiente y duplicar los medios técnicos instalados en el entorno a la espera de tomar imágenes del esquivo animal.
Así lo han indicado en la Delegación Provincial de Pesca y Medio Ambiente, que ha precisado que la decisión se ha adoptado tras una reunión mantenida en la mañana de este viernes para analizar los indicios y pruebas recogidas hasta ahora y que, de momento, no han revelado a presencia “a ciencia cierta” del animal en este paraje natural del municipio virgitano.
En la reunión se ha acordado, asimismo, instalar cinco nuevas cámaras de paso en lugares estratégicos del parque y de su entorno, que se suman a las cinco ya habilitadas. La captura de imágenes será controlada por un personal mínimo que, según las mismas fuentes, se ha encargado a miembros de Protección Civil de Berja.
En caso de que se recojan pruebas que certifiquen que el gran felino negro, que según los testigos podría tratarse de una pantera, se retomará el operativo para su captura vivo mediante un rifle anestésico que lo dormiría y permitiría su posterior traslado a un zoológico de Tabernas, cuyos propietarios han ofrecido colaboración para acogerlo.
El parque periurbano de Castala ya fue reabierto hace dos días al público aunque continuó en ese caso en marcha el operativo activado. Ya entonces el alcalde, Antonio Torres, trasladó la necesidad de ir recuperando, “poco a poco, la normalidad” en la zona aunque, por razones de seguridad, se mantuvo la piscina, principal atractivo del parque en la época estival.
Las últimas novedades en el operativo se producían hace tres días con el avistamiento del animal por parte de dos ciclistas que transitaban por el parque. Ambos testimonios detallaron que el gran felino negro se había “cruzado a su paso” en el mismo punto en el que habría sido visto el pasado viernes por dos agricultores, quienes circulaban en tractor y a los que “se les puso al lado”.
El Ayuntamiento, en coordinación con el puesto de mando, decidió, asimismo, a contactar y pedir asesoramiento a un profesional “especialista” en este tipo de fauna para que orientase en el rastreo del animal. Su incorporación se produjo hace dos días en los que ha estado colaborando con los efectivos desplazados.
Si bien las cámaras de paso habilitadas junto a las jaulas-trampa con cebo como reclamo y en las inmediaciones de fuentes naturales de agua no han conseguido captar la imagen del animal, si se recogieron “huellas” que finalmente no han dado un resultado “positivo y concluyente”.
El operativo ha estado integrado por tres miembros del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y tres agentes de Medio Ambiente y la búsqueda se ha llegado a extender en un perímetro de unas 500 hectáreas en el entorno del parque de Castala y en la vertiente sur de la Sierra de Gádor, en el término municipal de Berja.
MEDIOS TÉCNICOS
En concreto, en el parque de Castala, donde hace dos semanas un vecino dijo haber avistado una pantera, se han instalaron tres jaulas con carne como reclamo y cinco cámaras de paso. Estas cámaras, instaladas a petición de Protección Civil de Berja y del Ayuntamiento del municipio del Poniente almeriense, son IP y están dotadas de antena wifi que direcciona las imágenes captadas a un servidor web ubicado a 500 metros de distancia.
El dispositivo audiovisual, que se activa ante el movimiento, permite, asimismo, la toma de imágenes con baja luminosidad. Según indicó en su momento el alcalde de Berja, el primer avistamiento del animal se produjo hace dos semanas por parte de un vecino que caminaba por la zona si bien, ante el temor de que se le tomara “por loco”, no puso el hecho en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad hasta el día 20.
Recordemos que el martes 22 de agosto, L. O. publicaba en LA GACETA DE ALMERÍA que había sido avistado en el Parque Natural de Casta en Berja una pantera.
La localización de una pantera en el parque natural Castala tiene alarmados a los vecinos de su zona de influencia, sin que hasta ahora las autoridades virgitanas y dalienses se hayan pronunciado sobre este animal que ha sido visualizado en esta área de ocio y disfrute a la que suelen concurrir numerosas personas de todas las edades y condición social amantes de la naturaleza.
Según indicó Torres, el primer avistamiento del animal se produjo hace dos semanas por parte de un vecino que caminaba por la zona si bien, ante el temor de que se le tomara “por loco”, no puso el hecho en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad hasta el lunes.
Tras dos días de rastreo por el parque de Castala, el Alcalde del PP de Berja, Antonio Torres, ha señalado que se ha constatado la existencia de este animal después de comprobar que la carne usada como cebo para localizar por donde deambula haya sido ingerida. “Yo lo he visto y no sé lo que es, pero no me gustaría encontrármelo de frente”, ha señalado.
Según ha detallado el regidor, se trata de un “felino de dimensiones considerables y de color negro”, por lo que los primeros datos apuntan a que podría ser una pantera “que alguien, de manera imprudente, haya soltado en la sierra tras tenerla de mascota”.