CSI-CSIF insta a que el problema de la violencia escolar sea abordado durante el curso 2005-2006. Este sindicato aboga por un debate serio y responsable con la participación de todos los sectores implicados en la educación para llegar a una solución que ataje las agresiones y las conductas violentas.
CSI-CSIF insta a que el problema de la violencia escolar sea abordado durante este curso 2005-2006. El sindicato propone un debate serio y responsable en el que todos los sectores implicados tengan la palabra, de manera que se llegue a una solución para atajar la violencia en las aulas. Para este sindicato, los problemas de convivencia en los centros educativos, que tienen su máximo exponente en las agresiones físicas y psíquicas que se producen contra el profesorado y entre los propios alumnos, alteran de forma importante la vida en los mismos y socavan los propios cimientos del proceso educativo.
Este deterioro tiene una fuerte incidencia en el desarrollo de la labor docente y provoca en el profesorado estados de ansiedad, depresiones y otras alteraciones psicológicas, por no poder realizar su trabajo en unas condiciones dignas y adecuadas, y consecuentemente no alcanzar los objetivos educativos programados. Así mismo, no queremos olvidar las agresiones que están sufriendo algunos profesores. Aunque todavía escasas, están teniendo una increíble progresión, y marcan tanto profesional como personalmente la vida futura de estos profesionales. Por eso deben ser perseguidas penalmente por la Administración.
Esta problemática también repercute en el derecho constitucional de los alumnos a recibir una educación de calidad, puesto que obstaculiza la obtención de los objetivos, altera el normal desarrollo de las actividades en el aula y desmotiva al alumnado, la mayoría del cual quiere aprender.
CSI-CSIF considera innegables, e inalienables, los derechos del profesor a trabajar dignamente y del alumno a aprender en las mejores condiciones. Es por ello por lo que considera imprescindible que urgentemente, en este curso 2005-2006, se aborde el tema de convivencia en los centros educativos. Para ello es necesario que la Consejería abra el debate y el diálogo con las organizaciones sindicales, de padres y de alumnos, con el objetivo de consensuar medidas que erradiquen o minimicen los problemas de convivencia en los centros.
En este sentido, CSI-CSIF ya propuso antes del verano en el Consejo Escolar de Andalucía que se abriera un debate sobre los problemas de convivencia escolar y los actos de violencia en nuestros centros educativos y hoy nos podemos congratular de que esta petición haya sido atendida y que ya se hayan iniciado los trabajos en el seno de dicha Institución.
Estas medidas deben abarcar desde modificaciones normativas y estructurales de los centros que estén en consonancia con la realidad del problema, hasta la dotación de recursos y medios materiales y humanos a los mismos. En cuanto al profesorado, es necesario actuar, al menos, en dos frentes: el formativo y el jurídico. Hay que establecer un Plan de Formación específico sobre convivencia escolar y resolución de conflictos, e implementar una adecuada cobertura jurídica y apoyo de la Administración ante las agresiones al profesorado, que cada día por desgracia están siendo más frecuentes.