Asimismo, afrontaron esta edición "con la ilusión y la esperanza de en el 2009 siga creciendo en calidad y en número de visitantes" esta iniciativa que surgió a través de la Concejalía de Consumo del Consistorio, con el fin de organizar un mercadillo el último domingo de cada mes en el que poder adquirir los productos y disfrutar de la gastronomía típicos del pueblo.
El concejal de Consumo, José María Molina, declaró en la inauguración de esta última edición del año, su "satisfacción y agradecimiento" a la Asociación de Comerciantes del municipio, ya que "sin su apoyo y colaboración no hubiera sido posible hacer este mercadillo que ya se ha convertido en un referente para todos los murcianos amantes de la artesanía local".
Entre otras cosas, los visitantes pudieron comprar alfombras de esparto, vasijas de barro, ropa, libros, embutidos, sartenes, muñecas, quesos, repostería casera, y otros objetos realizados de manera artesanal, mientras que algunos de los productos exhibidos no se pusieron a la venta por su valor histórico o personal.
Tal y como hizo el mercadillo en otras ocasiones, se sorteó un cheque de cien euros y la Oficina de Turismo de Blanca ofreció, a todo aquel que así lo solicitó, un guía turístico para conocer los rincones más bellos y emblemáticos del municipio.