- Consistiría en tener menos radiactividad en el cuerpo
- El isótopo radiactivo potasio K-40 reduciría la longevidad
- El cuerpo contiene unos 245 gramos de dicho isótopo
- Si sólo tuviera siete gramos, podríamos vivir 2.500 años
- Los sumerios vivieron más porque tenían menos potasio K-40
- Esto se contradice con los melocotones chinos de la inmortalidad
- Ivan Stepanovich Filimonenko diseñó también un platillo volante
- También diseñó un método de fusión fría para producir energía limpia
- Hallaron un “elixir de la inmortalidad” en una tumba china de dos mil años
- Ese misterioso líquido está compuesto de nitrato de potasio y de mineral alunita
Un científico ruso, el talentoso físico e inventor Ivan Filimonenko, descubrió que el secreto de la inmortalidad de los antiguos estaría relacionado con una menor cantidad del isótopo radiactivo llamado potasio K-40 que se halla en el cuerpo humano, principalmente en los huesos, y que sería la principal fuente de radiactividad en nuestro físico.
Son ricos en potasio los plátanos, los melocotones, los melones y otras frutas, pero esto no quiere decir que sean malos para la salud en principio. El plátano es uno de los alimentos más radiactivos que se conocen, pero se considera muy sano. Es una comida habitual en cualquier parte del planeta, pero muy sana por su alto contenido en potasio, pero hay determinadas algas como la spirulina o la chlorella, o la ceniza volcánica como la zeolita que tienen la facultad de ayudar a limpiar el cuerpo de metales pesados.
El aumento de la concentración de sustancias cancerígenas en la atmósfera, vuelve el suelo más radiactivo y los alimentos que comemos. Cuando se utiliza un fertilizante que contiene potasio K-40 la radiactividad del suelo se duplica cada año, ya que la vida media del isótopo potasio K-40 dura varios miles de millones de años.
En 1957, Ivan Filimonenko propuso un método ecológico de producción de energía limpia a través de la fusión fría, y un método único de protección contra la radiación. Después de la muerte de Kurchatov, en 1968, Filimonenko fue despedido de la organización Estrella Roja, y hubo una lucha de ideas políticas, en la que nadie se interesó por la ecología. Siempre ocurre igual con los grandes inventores como Tesla. Ahora tenemos lo que tenemos.
DESCUBRIMIENTO
¿Por qué el cuerpo humano ya no vive mil años como el tiempos del Antiguo Testamento? Según el académico Ivan Filimonenko, de Moscú, la duración de la vida humana se ha visto reducida por el potasio radiactivo. En la antigüedad, los alimentos contenían 179 veces menos potasio radiactivo que ahora. Esta tendencia puede observarse al investigar los árboles: el abedul vive hasta 250 años (contiene un 13,8% de óxido de potasio), el pino 600 años (6,9%) y el árbol de las pieles 1.200 años (3,2%). Utilizando la proporción, se puede calcular que la vida del ser humano duraría 12.250 años antes del diluvio universal, según un extracto del libro “Misterios y Paradojas del Tiempo” de Vadim Chernobrov.
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El científico ruso Ivan Stepanovich Filimonenko, que murió en 2013, descubrió que un ser humano podría vivir decenas de miles de años. Descubrió que la vida útil de una persona dependería directamente de un isótopo radiactivo llamado potasio K-40. Según el científico, si el cuerpo humano contiene 245 gramos del isótopo potasio K-40, la persona promedio viviría 61 años y siete meses, pero si contuviera siete gramos, la esperanza de vida aumentaría a dos mil quinientos años. También descubrió que el nivel de isótopo radiactivo potasio K-40 en el cuerpo de un estudiante ruso o kazajo es cuatro veces mayor que en el francés o en el estadounidense.
Los artefactos encontrados en el antiguo imperio sumerio sugirieron a los científicos que el contenido de potasio K-40 en los pueblos antiguos era 175 veces menor que el nuestro, lo que significa que podrían haber vivido una media de 14.000 años, tal y como se describe en las tablillas sumerias estudiadas por los historiadores. Por lo tanto Filimonenko señaló que la esperanza de vida está vinculada con el escaso contenido de isótopos radiactivos en el cuerpo humano.
Hace medio siglo Filimonenko desarrolló instalaciones únicas para neutralizar la radiación pero casi nadie apoyó su proyecto. Con la ayuda de estas instalaciones sería posible limpiar la radiación en islas y regiones para crear un paraíso donde un ser humano podría alcanzar la inmortalidad.
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DESCUBRIMIENTO
Ivan Stepanovich Filimonenko, uno de los fundadores de la física nuclear y el desarrollador del proyecto para neutralizar la radiación, no intentó crear un elixir de eterna juventud, pero se acercó a ello. El descubrimiento realizado por este destacado científico no sólo es sensacional, sino, a primera vista, fantástico.
Sabiendo que la principal fuente de contaminación radiactiva es el isótopo potasio K-40, Ivan Stepanovich calculó que la duración de nuestra vida es inversamente proporcional a la cantidad de elementos radiactivos contenidos en el organismo. Es este isótopo el que se descompone en el cuerpo humano y destruye todas las células vivas. Sin embargo, el cuerpo las restaura, pero la acción del isótopo no se detiene y las células mueren una y otra vez.
El programa genético humano estaría diseñado para sustituir células no más de cien veces y, una vez agotado su límite, el cuerpo cedería ante el monstruo radiactivo del potasio. Así llegaría la inevitable vejez y muerte. Por lo tanto, dado que obtenemos exposición a la radiación del medio ambiente, cuantas menos fuentes de radiación hubiera en dicho entorno, tanto mayor sería la esperanza de vida promedio.
Ivan Stepanovich hizo algunos cálculos y determinó que si el cuerpo humano a lo largo de su vida contuvo 245 gramos de potasio K-40, la duración de su vida sería igual a 61 años y siete meses. Si se redujese el contenido a siete gramos, el promedio sería de 2.531 años, y con 0,7 gramos de potasio K-40, la esperanza de vida aumentaría a 25.300 años.
NEUTRALIZACIÓN DE LA RADIACTIVIDAD
Filimonenko creó la primera unidad de neutralización de la radiactividad del mundo hace cincuenta años y superó con éxito todas las pruebas. Pero como suele ser el caso, no se le permitió poner en práctica esta instalación. Pero Ivan Stepanovich soñaba con realizar su experimento en algún territorio y reducir el contenido de sustancias radiactivas, si no al nivel que estaba en la tierra de los antiguos sumerios, al menos a la mitad.
Sin embargo, tal experimento tendría que estar estrictamente clasificado, porque de lo contrario miles y miles de peregrinos se apresurarían a este territorio con la esperanza de prolongar su vida. Según el científico, los poderosos, incluso entonces, se ofrecieron a equiparlo con instalaciones milagrosas en ciudades subterráneas especiales para ellos únicamente, no para el pueblo.
EL ISÓTOPO DICHOSO
El isótopo de potasio K-40 sirve para datar la antigüedad de rocas y meteoritos. El potasio K-40 es un isótopo radioactivo de potasio que tiene un periodo de semi-desintegración muy largo. Constituye 0,012% de la cantidad total de potasio que se encuentra en la naturaleza.
Emiten radiación muchos objetos o elementos de nuestra vida diaria, como plátanos, nueces del Brasil o el aguacate, pero se trata de un fenómeno completamente natural y del cual no tendríamos que preocuparnos. El potasio K-40, por ejemplo, es responsable de casi toda la radiactividad presente en el cuerpo humano, en particular en los huesos.
Los rastros de K-40 se encuentran en todo el potasio, y es el radioisótopo más común en el cuerpo humano. K-40 es un isótopo radiactivo de potasio que tiene una vida media muy larga y sufre una desintegración beta. Desde este punto de vista, también un cuerpo humano puede considerarse como una fuente de antimateria.
Aproximadamente el 89,28% del tiempo, se descompone en calcio-40 con la emisión de un electrón. La concentración de potasio en el cuerpo humano se basa estrictamente en el principio homeostático. El potasio se distribuye más o menos en el cuerpo (especialmente en los tejidos blandos) después de la ingesta de alimentos. Un hombre de 70 kilos. contiene alrededor de 126 g de potasio (0.18%), la mayor parte de eso se encuentra en los músculos. El consumo diario de potasio es de aproximadamente dos gramos y medio. Por lo tanto, la concentración de potasio K-40 es casi estable en todas las personas.
INMORTALES ANTIGUOS
En la lejana antigüedad, la inmortalidad era el destino exclusivo de los dioses o de las personas elegidas por ellos. Los dioses vivían en la apartada isla de Tilmun que significa “el lugar de la vida”. Cualquier persona que viviera allí, se volvería inmortal, ya que la frecuencia de su cuerpo se sincronizaría con el sistema energético de la zona. Quizás en la antigüedad existió realmente un lugar totalmente protegido de la radiación.
Gilgamesh, el quinto rey de Uruk, capital del estado sumerio, también soñaba con alcanzar la inmortalidad, por lo que viajó a la isla de Tilmun, pero los dioses no le revelaron el secreto y fracasó, a pesar de que su madre fue celestial y su padre mitad celestial y mitad humano. Él mismo fue celestial tres cuartas partes, pero su vida fue muy corta.
Hablamos de los eternamente jóvenes inmortales de la antigua China, de los habitantes inmortales del Olimpo en la antigua Grecia. El gran Rama que gobernó durante diez mil años es legendario en la India. Una de las famosas tablillas sumerias cuneiformes muestra los nombres y periodos de los ocho reyes. El primero de ellos En-menluana estuvo en el poder durante 43.200 años. El último Ibartut vivió 18.000 años.
ANTÍDOTOS CONTRA LA RADIACIÓN
1º.- El yoduro de potasio está aprobado por la FDA y también está disponible sin receta médica. También están las algas marinas, que pueden prevenir la aparición del cáncer de tiroides, como fuente de yodo natural. El yoduro de potasio, que también se conoce como el mineral de la tiroides, puede ayudar enormemente a prevenir el cáncer de tiroides ya que puede mantener el equilibrio correcto de yodo en la tiroides. Este compuesto también ayuda en el funcionamiento saludable de la tiroides y la protege contra hiper e hipotiroidismo.
2º.- Espirulina.- La espirulina es un súper alimento que se deriva de las algas verde azuladas y tiene muchos beneficios para la salud. Se usa comúnmente en diversas bebidas saludables. La gente consume espirulina por varias razones: sentirse más rejuvenecido, fortalecer el sistema inmune o desintoxicar el cuerpo.
Estudios recientes han indicado que la espirulina también es bastante útil en la terapia anti-radiación y según una investigación que se ha realizado con niños en Chernobyl, la espirulina también puede ayudar como un medicamento para el envenenamiento por radiación. Puede prevenir la aparición de enfermedades como la leucemia y ayudar al cuerpo a combatir infecciones bacterianas y virales. Cuando se toma por vía oral, también puede ayudar a eliminar el bario del cuerpo.
3º.- Chlorella.- La chlorella de agua dulce, es el alga unicelular que contiene la mayor cantidad de clorofila en cualquier planta conocida. Además de tener numerosos beneficios para el cuerpo, también es uno de los métodos más conocidos para expulsar la radiación del cuerpo. La chlorella, en particular, tiene la capacidad de neutralizar la radiación y eliminar del cuerpo las toxinas como el cadmio, las dioxinas y los PCB. Su capacidad para desintoxicar uranio, plomo y cobre también lo ha hecho muy valioso, especialmente teniendo en cuenta el escenario de hoy.
Los PCB o bifenilos policlorados (polychlorinated biphenyls) son una serie de compuestos organoclorados, que constituyen una serie de 209 congéneres, cada uno de los cuales consta de dos anillos bencénicos y de uno a diez átomos de cloro, es decir se forman mediante la cloración de diferentes posiciones del bifenilo, diez en total.
4º.- Shilajit.- Cuando se trata de eliminar la radiación de su cuerpo, el ácido fúlvico está en la parte superior de la lista, ya que puede descomponer los metales pesados y las toxinas en el cuerpo e incluso expulsarlo del sistema. Tampoco tiene ningún efecto secundario. Es rico en ácido fúlvico el shilajit de la India. El shilajit es un polvo de color marrón negruzco o un exudado de las rocas de alta montaña, que suele encontrarse en el Himalaya, el Karakórum, Nepal, Bután, India, Rusia, Irán , Mongolia y en el norte de Chile, donde se llama Shilajit andino.
Aunque a veces se hace referencia al shilajit como alquitrán mineral o resina, en realidad no es ninguna de esas cosas. Es una sustancia muy viscosa, como el alquitrán o la resina, de color marrón muy oscuro o negro, pero a diferencia de éstos, es fácilmente soluble en agua pero insoluble en etanol. El shilajit se compone de un 60% a un 80% de sustancias húmicas, como los ácidos húmicos y fúlvicos, junto con oligoelementos como el selenio.
5º.- Hongos Reishi.- Los hongos reishi, o Ling Zhi en chino, son conocidos por sus sorprendentes beneficios para la salud. Pueden fortalecer el sistema inmune y mejorar la circulación sanguínea. Un uso importante de este hongo que es muy relevante hoy en día es que se sabe que ofrece protección contra la radiación ionizante.
6º.- El hongo del sol de Brasil o agaricus soleil que es más eficaz que el reishi.
7º.- Magnesio.- El magnesio es un mineral importante en nuestros cuerpos y está asociado a una gran variedad de beneficios. Uno de los principales beneficios hoy en día es que el magnesio ayuda a eliminar los metales pesados que estimulan el daño por radiación de nuestro cuerpo. El aceite de magnesio es una de las mejores formas en que se puede incorporar a su cuerpo.
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PLATILLO VOLANTE MAGNÉTICO
¿Por qué se redujo y clasificó el proyecto único del plato magnético de Filimonenko? La escuela científica soviética era una de las más poderosas del planeta, por lo que no es de extrañar la cantidad de descubrimientos que hicieron los científicos de la URSS. Sin embargo, algo no encaja en este cuadro optimista: hay proyectos que incluso los científicos de hoy consideran brillantes, pero que resultaron ‘envueltos’ por la élite del partido, y algunos de ellos son generalmente clasificados. Y solo en los últimos años, al menos parte de la información sobre ellos comenzó a aparecer en el dominio público. En un momento, el mismo destino le sucedió a uno de los desarrollos del famoso científico soviético Filimonenko: un avión magnético real.
Se habló por primera vez del físico soviético Ivan Stepanovich Filimonenko a mediados de la década de 1950, cuando aún era joven. Se le conoce principalmente como la persona que introdujo el método de fusión nuclear fría. Otro proyecto, al que se asocia el nombre Filimonenko, lo muestra como diseñador, y no solo como físico nuclear. Se trata de su plato volante magnético.
No se sabe mucho sobre este proyecto, porque fue clasificado hace bastante tiempo. También se conservó la evidencia de testigos presenciales del funcionamiento de la radio de Filimonenko: por ejemplo, argumentaron que el mecanismo de su movimiento se basaba en la repulsión del campo magnético de la Tierra. También se conocen extractos de los comentarios oficiales al desarrollo que fueron recopilados personalmente por el autor: “Interactúa en discos cargados, con el campo magnético de la tierra, dando como resultado la fuerza de Lorentz, que mueve la aeronave”. En física, la fuerza de Lorentz es la fuerza ejercida por el campo electromagnético que recibe una partícula cargada o una corriente eléctrica.
Estructuralmente, el avión magnético de Filimonenko constaba de dos discos que giraban en direcciones opuestas y eran necesarios para equilibrar el sistema de interacción. También se supone que el dispositivo se basa en un mecanismo de emisión térmica, así como un circuito de apantallamiento de un campo magnético externo. La interacción entre las partículas cargadas y un intenso campo magnético proporcionaba el impulso para anular la gravedad.
SILENCIO Y REPRESIÓN
Esto continuó hasta mediados de la década de 1960, pero después de la muerte de los científicos, el trabajo en el proyecto se redujo y toda la información se clasificó. Según los rumores, el mariscal Zhukov participó personalmente en esto. Después de eso, no se supo nada sobre el proyecto único durante más de treinta años; sólo a fines de los años noventa del siglo pasado, el diseñador pudo volver a su magnetismo. Sin embargo, nunca apareció la información sobre este periodo de desarrollo, y en 2013 murió Ivan Stepanovich Filimonenko.
Y hace sólo unos años aparecieron las primeras menciones de este proyecto, pues se le quitó la etiqueta de secreto. Al mismo tiempo, hay muchos escépticos, incluso entre los científicos, que consideran que la información sobre un avión magnético no es más que un pato de periódico, pero es posible comprender completamente esta historia solo después de que se publique en su totalidad la información sobre los desarrollos de Filimonenko.
PREGUNTAS SIN RESPUESTA
Los científicos rusos, contra los illuminati.- El analista independiente Sergei Albertovich Sallj, doctor en ciencias físico-matemáticas, profesor, secretario de la parte de San Peterburgo de la Sociedad Rusa de Física, compartió información única sobre los logros de la ciencia soviética y el monopolio mundial del conocimiento.
¿Por qué la ciencia en la URSS se desarrolló activamente durante sólo quince años? ¿Por qué la fusión nuclear fría, descubierta por el doctor Filimonenko, no fue autorizada por Korolev, Kurchatov y Gluškov? ¿Qué hay detrás de las misteriosas muertes de estos grandes científicos? ¿Por qué el programa de fusión nuclear en frío en la Unión Soviética fue declarado pseudo-científico?
¿Qué pasó con el diseñador jefe de la empresa de San Petesburgo que participó en la fabricación de motores basados en la fusión nuclear fría? ¿Qué es lo que realmente trata la “Comisión de lucha contra la pseudociencia”? ¿Por qué los japoneses no son capaces de aplicar en su industria la tecnología alternativa? ¿Cuál es la verdad descubierta por el exministro de Economía de Japón, Heizi Takenaka? ¿Qué hay detrás de la tragedia de Fukushima? ¿Existe un arma geofísica? No tenemos respuesta a estas preguntas por el momento.
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ELIXIR DE LA INMORTALIDAD
Descubrieron un “elixir de la inmortalidad” en una tumba china de dos mil años.- Los arqueólogos creyeron al principio que se trataba de vino elaborado con arroz y granos de sorgo, pero era una bebida consignada en textos taoístas. Obviamente, un elixir de inmortalidad en una tumba significa que no había funcionado.
El pueblo chino honró la longevidad más que ninguna otra nación en el mundo, inquietud que les llevó a prácticas de encantamiento, plegarias, convocatorias de espíritus, represión de los demonios y bestias salvajes, hechizos basados en constelaciones o la alquimia, cuyo fin era elaborar el elixir de la inmortalidad.
De ello acaba de dar testimonio un grupo de arqueólogos que descubrió la bebida de la que se decía que conseguía la vida eterna. Se encontraba en una vasija de bronce de dos mil años de antigüedad que fue enterrada en una tumba antigua en la ciudad de Luoyang, en el centro de China, donde se realizaban trabajos de excavación.
El elixir lo forman 3,5 litros y al principio se pensó que era algún licor, ya que olía a alcohol. Ahora las pruebas de laboratorio han revelado que este misterioso líquido está compuesto principalmente de nitrato de potasio y alunita, los ingredientes principales de un “elixir de la inmortalidad” descrito en los en textos taoístas. La alunita es un mineral de la clase de los sulfatos. Químicamente es un sulfato hidratado de aluminio y potasio, que suele llevar como impurezas dándole tonalidad de hierro y sodio.
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Según la agencia de noticias Xinhua, el elixir mágico se encontró en una tumba perteneciente a un hombre noble de la dinastía Han del Oeste (202 A.C. al 8 D.C.). La familia dio un valor tan alto al elixir, que lo consideró digno de compartir su lugar de descanso final. En ese sitio, también se descubrieron vasijas de barro pintadas, materiales hechos de jade y bronce, una lámpara en forma de ganso y un tiesto de bronce que en su interior contenía un intrigante líquido amarillento.
El ejemplo más popular de esta obsesión china por la inmortalidad fueron los dos viajes del hechicero de la corte Xu Fu en busca del elixir durante la dinastía Qin. Sin embargo, ésta es la primera vez que se descubre una muestra intacta de ese líquido.
“El líquido es de gran valor para el estudio de los antiguos pensamientos chinos sobre el sueño de la inmortalidad y la evolución de la civilización china”, explicó Shi Jiazhen, director del Instituto de Reliquias Culturales y Arqueología de Luoyang. La antigua tumba cubre más de doscientos metros cuadrados y, además del elixir, sus excavadoras han dejado al descubierto otros utensilios de bronce y vasijas de barro pintadas.
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LOS MELOCOTONES DE LA INMORTALIDAD
El melocotón evoca la idea de inmortalidad en la cultura china a pesar de ser ricos en potasio. Cuenta la leyenda que una poderosa diosa conocida como Reina Madre de Occidente poseía un jardín en el que cultivaba melocotoneros, de los cuales, cada tres mil años, brotaban unos melocotones que otorgaban la cualidad de vivir para siempre a quien los comía, según Ruth Espinosa.
En algunas culturas, el melocotón simboliza una larga esperanza de vida. En China, el melocotón es el símbolo de la inmortalidad y de la larga esperanza de vida. También se le atribuyen propiedades para aumentar el bienestar anímico y físico, por lo que es tradición tener flores de melocotonero en los hogares.
Los melocotones, presentes continuamente en la poesía y arte de China, evocan en este país la idea de la inmortalidad, y son, por lo tanto, un motivo preferido en las pinturas y artesanías que se regalan por los cumpleaños. Eso se debe a que una leyenda afirma que la Reina Madre del Oeste, una de las deidades más poderosas desde la dinastía Han, tenía un jardín donde los melocotones de la inmortalidad que daban fruto una vez cada tres mil años, y el que comiera de los mismos alcanzaría la inmortalidad.
También era la madera de melocotón la preferida para hacer las camas de los niños, pues se consideraba que le proporcionaría una vida feliz. En general se consideraba que la madera de melocotón ahuyentaba a los malos espíritus. Durante la dinastía Zhou, ya existía la costumbre de que cuando el rey, los nobles, o los altos funcionarios visitaban sus dominios, iban precedidos de un grupo de hechiceros y adivinos, armados con maderas de melocotón y cañas, para protegerlos de los malos espíritus.
Utilizado tanto por los budistas como por los taoístas, la madera de melocotón, era muchas veces la única defensa que tenía la gente contra los malos espíritus. Los ubicuos guardianes de las puertas que no pueden faltar en ninguna casa, representan, en algunas regiones a dos hermanos, Shen Shu y Yu Lu, que según las leyendas, vivieron en tiempos remotos en el Monte Tu So, bajo un árbol de melocotón, y se decía que tenían poder sobre los espíritus descarnados, a los que cazaban y echaban a los tigres.
La acción del melocotón le viene dada por ser un símbolo del sol vernal, bajo cuya influencia está lleno de flores antes de que una sola hoja despliegue de sus ramitas, tiene por tanto más vitalidad que los otros árboles. Por esa vitalidad ahuyenta a los espíritus, y se relaciona con la inmortalidad.
La vitalidad del melocotón relacionada con ahuyentar a los diablos, y el poder de conferir la inmortalidad, en su sentido más amplio, implicaba no sólo al individuo, sino a su linaje, lo que convirtió al melocotón en símbolo también de reproducción. El melocotón es la vitalidad de la primavera, y de hecho, en China, el mes de marzo es el mes del melocotón, y la primavera se evoca con el melocotón.
El término que engarza mejor con los dos conceptos del melocotón presentes en la mentalidad china es la fiesta llamada Pántáohuì o Festival de los Melocotones Planos (llamados paraguayas en español), una fiesta que se celebraba el tercer día del tercer mes lunar en honor de la Reina Madre del Oeste. Durante la misma, los jóvenes se reunían en el bosque o a la orilla de los ríos, y empezaban cantándose canciones para ir conociéndose, pasando luego a mayor intimidad, acabando generalmente en grandes orgías rituales que relacionaban la fecundidad de la tierra con la de las mujeres.
La fuente de los melocotoneros sirve también en chino para designar un paraíso o una utopía. Esto se originó en un cuento del escritor Tao Qian, del siglo IV de nuestra era, llamado precisamente “La historia de la Fuente de los Melocotoneros”, cuya versión española se puede leer en el libro Shangrilá. Cuenta que unos viajeros llegan a un lugar donde reina la felicidad absoluta. En su obra citada, Eberhard piensa que ya es una tradición china que sitúa el paraíso en tierras de los antepasados de la minoría Zhuang o de la Yao.
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El papel religioso del melocotón se evidencia de numerosas formas a lo largo de la historia de China. En los templos es costumbre ofrecer a Buda y a los diferentes dioses melocotones, y no es extraño encontrar en los hogares chinos una estatua de Shou, el dios de la longevidad, que porta en su mano uno de los famosos melocotones rosados de la leyenda de la Reina Madre del Oeste.
El melocotonero es un símbolo de poder en China. Los antiguos guerreros elaboraban con su madera sus armas, ya que se dice que puede alejar el mal, y. con los pétalos de sus flores, la magia taoísta elabora una poción muy eficaz en cuestiones de amor.
La emperatriz Cixi mandó construir en el Palacio de Verano de Pekín un lago con forma de melocotón, el lago Kunming, que se localiza junto a la Colina de la Longevidad. Cada día la emperatriz recorría el corredor de 750 metros que discurre a orillas del lago para tomar te, en ocasiones de flor de melocotón, en el barco de mármol y madera que ella misma ordenó construir para tal fin.
Tanta es la importancia del melocotón en China que a los niños menores de edad se les suele cortar el pelo con forma de melocotón, buscando esa protección y longevidad que proporcionaban los melocotones del huerto de Xi Wangmu. Ésta es la China tradicional que a mi me gusta, y no la del Partido Comunista.
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El autor de este vídeo es Periodista Licenciado y Colegiado, con cuarenta años de experiencia, y Oficial de Aviación Reservista Honorífico, entre trece titulaciones.
Mi seudónimo es Miski Liu Suria. (Un seudónimo es un nombre o ‘alias’ utilizado por un periodista en sus actividades, en vez del suyo propio, pero en realidad es mi nombre espiritual.)