De ellas, 75 han estado dirigidas a la modernización y renovación de estas infraestructuras y 56 a la puesta en marcha de nuevas fincas
Las 162 peticiones de licencias restantes están pendientes de resolver y a la espera de aportación de documentación para darles luz verde
El portavoz municipal ha calificado este hecho de “muy positivo” ya que “da buena cuenta de la excelente salud de la que goza nuestro sector agrícola, que se encuentra en constante crecimiento y preocupado por la innovación y la competitividad”
La Junta de Gobierno Local ha tratado, en su primera sesión del año, un total de seis puntos relacionados con las distintas áreas de gestión municipal. Entre ellos, han destacado la aprobación de los padrones de las Tasas por Suministro de Agua y Servicio de Alcantarillado, precio público de agua para usos especiales y canon autonómico de mejora correspondiente al cuarto trimestre del 2016. Además del padrón de las tasas de depuración de aguas residuales correspondientes al cuarto trimestre de 2016. De igual modo, se ha dado luz ver a aspectos relacionados con la actividad agrícola y más concretamente, con la aprobación de nuevas licencias para la reforma y modernización de invernaderos.
De esta manera, el Ayuntamiento de El Ejido empieza el año como lo acabó, registrando un crecimiento al alza en el número de solicitudes tanto de renovación de estructuras y aplicación de nuevos sistemas dirigidos a la modernización de fincas agrícolas como a la puesta en marcha de nuevas infraestructuras. Y es que la concejalía de Agricultura cierra el ejercicio de 2016 con un total de 293 las peticiones de licencias recibidas. Una importante cuantía de la que 75 de ellas han estado dirigidas a la realización de reformas y 56 a la construcción de nuevos invernaderos. Las 162 restantes se encuentran en fase de tramitación y pendientes de la aportación de documentación y finalización de los correspondientes proyectos técnicos.
A este respecto, el portavoz municipal, José Francisco Rivera, ha dicho que “se trata de unos datos muy positivos ya que dan buena cuenta del dinamismo y excelente salud de la que goza nuestro sector agrícola, que se encuentra en constante crecimiento”. Constituyendo, por tanto, “un pilar económico muy importante, fuente de ingresos y de creación de empleo; aspectos que convierten a El Ejido en una de las ciudades españolas más prósperas”, ha apuntado el responsable municipal.
Rivera ha relacionado estos datos con “el carácter innovador y emprendedor de nuestros agricultores, que muestran una preocupación constante por hacer de sus fincas infraestructuras cada vez más adaptadas a las últimas novedades tecnológicas aplicadas tanto en las propias estructuras como en los sistemas de cultivo”. Y en este sentido, se ha referido a la introducción de mejoras dirigidas a garantizar una mayor inercia térmica, más capacidad de ventilación para mejorar la renovación del aire, mayor hermeticidad para el control de plagas, favoreciendo así la producción integrada de frutas y hortalizas de excelente calidad”, ha concretado.
El portavoz ha insistido en la “gran apuesta del sector por modelos cada vez más eficientes y rentables con la incorporación de I+D+I que pasa también por el ahorro energético, la sostenibilidad y el aprovechamiento de los recursos naturales; convirtiendo nuestra agricultura en una de las más avanzadas del mundo”. Una apuesta que, tal y como ha dicho, es también municipal ya que “han sido muchos los pasos que hemos dado desde el gobierno local para adaptar nuestro campo a las exigencias del mercado con la puesta en marcha de la Ordenanza Reguladora del Entorno Agrario, teniendo que adaptarse las nuevas construcciones a los criterios de esta normativa en cuanto a accesos a fincas, lindes y dotación de sistemas de recogida de pluviales para poder así frenar los problemas de impermeabilidad e inundaciones que está sufriendo el municipio”.
A todo ello hay que sumar el ambicioso Plan de Mejora de Caminos Rurales con el que se está consiguiendo modernizar y renovar buena parte de la red viaria rural. Y cabe recordar, también, la modificación realizada del PGOU para la instalación de invernaderos en suelo urbano no consolidado, la rectificación a la baja de la ponencia de valores catastrales o la agilización de los trámites administrativos para la obtención de las licencias.