{mosimage}La realidad es que desde el Ministerio de Fomento ni nos han remitido el Estudio Informativo de Integración del Ferrocarril, a pesar de que lleva año y medio de retraso, ni ponen un euro en los presupuestos.
Creo que en este punto resulta interesante recordar que el secretario provincial del PSOE, Diego Asensio, me acusó de no haber hecho nada para favorecer el soterramiento y que, en plena campaña electoral, el ahora consejero de Agricultura, Martín Soler, invitó a los almerienses a que me llamasen para recordarme que mi negativa a firmar el convenio en esa campaña estaba retrasando la obra. ¿Qué ha hecho por el soterramiento el señor Asensio después de que lo firmásemos en Madrid en junio? ¿Y antes de eso? La ministra Magdalena Álvarez, que por lo visto tenía muchísimo interés por firmar el convenio en marzo (en plena campaña electoral) no tuvo tiempo de firmarlo hasta tres meses después. ¿Era o no era interés electoralista?
Por es no parece justo, ni tan siquiera decente, acusar al Ayuntamiento de obstruccionismo o confrontación en el tema del soterramiento, como acaba de hacer el portavoz municipal socialista José Antonio Amate. Estamos dispuestos a colaborar en plena sintonía por el bien de Almería, pero para el PSOE, si recuerdas sus deberes a las instituciones estás confrontando y eres un desleal, y si permaneces prudentemente callado eres un gandul. Si el señor Amate tiene la solución de cómo debería actuar el alcalde de Almería, que me lo diga, y que no haga como cuando aseguró tener una solución para ubicar el botellón. Solución que todavía estamos esperando, por cierto.
Todas estas cortinas de humo evidencian lo que venimos diciendo desde hace años: que el Gobierno socialista podrá tener toda la voluntad política que ellos aseguren tener para hacer el soterramiento, pero carecen de la capacidad económica para dedicarle fondos. Y si eso no es así, que nos expliquen las razones por las cuales no se precisa qué inversión concreta hay dispuesta para este fin. Los almerienses queremos más hechos y menos palabras porque lo que verdaderamente está soterrado es el presupuesto para este proyecto.