Un policía de paisano afeó la conducta del Alcalde, Arturo Grima, ante el atropello de un ciclista en Turre, en la zona del cruce del puente antiguo, por un conductor que se disponía a salir del apracamiento en que poseía su coche en batería, con tan mala suerte que en ese justo momento un ciclista pasaba con lo que cayó al suelo y trasladado al Hospital “La Inmaculada” de Huércal-Overa sin necesitar ingreso.
Los hechos acaecieron a primeras horas de la tarde y rápidamente se propagaron por el pueblo y llegaron a la comarca totalmente desvirtuados como si de una novela kafkiana se trata. Se hizo necesario el amanecer para que se conocieran los hechos en su justa medida, y todas las fuentes informativas consultadas coinciden en señalar que el conductor salió de un bar, sito en la zona del cruce de la carretera del puente viejo, para coger su coche que lo tenía aparcado en batería, con tan mala suerte que al dar marcha trás pasaba una bicicleta y fue atropellada.
Se dio la curiosa circunstancia de que el Alcalde pasaba por allí para recoger a su hijo, tras lo cual regresó al lugar de los hechos en su coche particular. Tras el atropello se avisó a la Guardia Civil que hizo acto de presencia inmediatamente y auxilió al ciclista atropellado ante la ausencia del conductor, que se presentó sobre las 7″30 de la tarde, llevándolo una ambulancia al hospital huercalense donde solo se le percibió una dolencia de cadera que no necesitó ingreso.