Antonio Guerrero Ruiz, nacido en Huelva en 1971 y residente en Almería, estudió Relaciones Laborales, es grado en Filosofía, máster en filosofía teórica y práctica, y actualmente es doctorando en filosofía por la UAL. También es profesor invitado en la Uned en el posgrado de detective privado. Figura como uno de los redactores de contenidos de la Ref (red española de filosofía), actividad que comparte como colaborador de prensa con el Diario de Almería, Diario 16, y Canal Sur Radio. Ha publicado La mentira Zurda. Cuentos de Joseph Landowski. IEA (2011), Literatura Zurda. IEA (2017), Temperamento. Pensamiento filosófico en la obra de Mary Shelly . Apeiron ediciones.(2017), Una Guerra en el Limbo. Playa de Ákaba (2018), reeditado por Parnass Ediciones (2019), traducido al inglés por Parnass Ediciones (2020), Apuntes de Filosofía Moral. Playa de Ákaba (2018), y Filosofía sin Lactosa. Dauro Ediciones (2020). Ha participado en diferentes obras colectivas y obtenido diversos premios como el de finalista en el concurso internacional de ensayo Pensadores Siglo XXI de la Universidad Argentina Siglo XXI. La obra no escrita. Análisis biográfico de la obra de Nicolás Salmerón, es su último libro y supone una investigación sobre las facetas más desconocidas del personaje que, más allá de haber sido presidente de la I República, tiene una obra filosófica de gran calado que en cierta forma es aún desconocida.
Sinopsis:
Uno de los filósofos españoles en los que se cumple la simultaneidad de su
conocimiento y de su desconocimiento es Nicolás Salmerón. Y lo es en tanto y en
cuanto su labor ha sido notable y significativa no solo para la filosofía española sino
para el conjunto de la sociedad de este país, por su carácter multidisciplinar; pero
también lo es por ser la suya una trayectoria donde no existen demasiados textos
escritos de su puño y letra en torno a la filosofía sino, como decimos, un amplio trabajo
práctico sobre el que es necesario un nuevo análisis para absorber una visión de
conjunto. Su obra en ese sentido es muy conocida y también muy desconocida: se
conoce a un Nicolás Salmerón emblemático y estandarizado, al político sobre todo,
pero se desconocen las motivaciones, derivaciones, ulterioridades y el significado de
sus ideas respecto a la filosofía española hasta no saberse aún cuál es su lugar real
dentro de ella. Tal vez su obra está en parte contextualizada en los ámbitos políticos,
pedagógicos, periodísticos, etc, y no se han obtenido todos los réditos filosóficos
suficientes. La expresión mejor para comprenderlo y para reflexionar sobre ello es la de
“Filosofo práctico” con ciertos matices que más adelante añadiremos. Con esta idea
damos sentido al lado desconocido de este filósofo y lo hacemos desde la esencia de su
pensamiento.
En este trabajo explicaremos por qué no existe una obra escrita y que si no
existe es precisamente por eso, por su interés en tener una obra práctica más que
teórica. Esa es una idea clave de esta investigación académica y a partir de ella vamos
a hacer un viaje hermenéutico y ontopraxeológico1. Con esto decimos que haremos un
recorrido interpretativo de la literatura existente y a la vez estudiaremos los hechos concretos, según se deduce de Quintín Racionero2. En ese derredor vamos a analizar en primer lugar el problema de la identidad de la filosofía española, un problema que si cabe aún sigue latente desde el momento fundacional del concepto de filosofía española, y que implica al Salmerón que conocemos y a la inversa, ofrece con su
momento histórico una relación de acción bidireccional. En segundo lugar
analizaremos los aspectos más notorios de su talante práctico (producto de la
bidirecionalidad anterior), ya sean su multidisciplinariedad, desde la pedagogía, la
política, hasta el positivismo, y el más singular: su intervencionismo.
La conclusión es que fue un buen ejemplo de filósofo práctico español, desde el
punto de vista histórico y desde el personal. Su singularidad es sin duda un elemento
de análisis y una definición propia.