Empezaron las obras entre las calles de Séneca, Aduana y Copérnico, con un desmonte de ocho a diez m. en un terreno que es fangoso e inundable, Allá por el 2002,las obras duraron lo que quisieron los responsables de la empresa concesionaria Jarquil. Después se han sucedido toda serie de contratas, subcontratas, variantes de todo tipo y condición , con los medios más primitivos y rudimentarios, comunicación a base de silbidos, gritos, voces , juramentos, etc.
¿Cómo sino comunicarse en siete plantas con distancias de decenas de m.? Trabajando fines de semana, todos los sábados y parte de domingos, con insultos a los que protestábamos, sin apenas medidas de seguridad, (un trabajador cayo desde un primero, no supimos más). Lanzando a la calle directamente y a través de unos tubos sin protección, toda clase de escombros, sacos medio vacíos, polvo y que todavía no termina. A las protestas de algunos vecinos, se contestaba o con risas o con insultos o lárguese a su país. Las numerosas llamadas a los municipales sin contestación, lo mismo que las de algunos concejales , que les parece natural que se use los mismos métodos , dentro de la población que en la sierra o en el descampado..
Item más. La calle tiene árboles en las dos aceras, sin embargo en la nueva construcción ,no solo no han puesto , sino que no han hecho los alcorques necesarios para poder plantarlos, con la contrariedad de que visto esto, dos bajos han eliminado dos de los árboles que había. (C. Séneca).
Sin asimilar todavía lo anterior, han empezado dos obras en la confluencia de las calles Séneca ,Infanta Cristina y Príncipe de Asturias , con los mismos defectos.
Lo primero cortarnos el abastecimiento de agua durante dos días, siguiendo con cortar la circulación rodada todos los días, obligando a los vehículos ha circular en dirección prohibida, el dejar el suelo llena de gravilla , lo que ha ocasionado mas de una caída. Esto, que sería causa de alguna toma de decisión por las autoridades, no parece ser de su interés.
Algunos , entre los mas de cien vecinos que vivimos en Infanta Cristina, no queremos aguantar otros tres años más y por ello, en principio informamos de lo que estamos sufriendo por el abandono de nuestros representantes municipales, y que si no se toman medidas, de defensa de nuestros derechos como vecinos, actuaremos con otras medidas de presión que estudiaremos.
Esto es un ejemplo que se multiplica por todo el término municipal, los constructores se saltan las normas, la policía no interviene, los culpables son los de la obra, según las órdenes que reciben del concejal o responsable.
Esto se acentúa en la Calle Pablo Picasso paso obligado de vehículos hacia la Mojonera y la parte alta de la villa, así como de los jubilados hacía la residencia de Día y de los enfermos que van al ambulatorio, las aceras cortadas y la calle ocupada , hay que pasar por entre vehículos, ha habido caídas e infinitos sustos.
La presente información esperamos que sirva para concienciar a los responsables para que no sigamos sufriendo los mismos inconvenientes durante más años.