El espectáculo sirvió de ceremonia de clausura de la VI Reunión de Medicina y Deporte
El deporte y la salud fueron sometidas a debate durante la VI Reunión de Medicina y Deporte por ponentes de reconocido prestigio a nivel nacional e internacional. A este binomio, se le unió una tercera pata que ha demostrado sobradamente que guarda una relación más estrecha de la que parece con el mundo del deporte o la medicina: la música.
‘Michael Thomas, Connecting Musicians Project y solistas invitados’ transformaron la tormenta del viernes en una lluvia fina, impecable y envolvente de música en el Auditorio Maestro Padilla. Interpretaron diversos registros con un concierto absolutamente innovador. Desde las obras para piano, brillantemente resueltas por los pianistas José Luis Arrabal y Adrián López, hasta las apariciones de Salvador Esteve, Violín, y Paloma García, Celio, quienes demostraron con una asombrosa habilidad y finura que la música penetra por los oídos para seducir al cerebro y tocar el corazón de los espectadores en sus butacas.
El público guardó un silencio, casi sepulcral, durante la sucesión de obras hasta su fin, donde la calma del patio de butacas tornó a una tormenta en la que los aplausos fueron los truenos, los relámpagos y los rayos que envolvieron de una luz estrellada a los músicos, liderados por el gurú, Michael Thomas. Los jóvenes intérpretes resolvían cada obra con una naturalidad y una entereza atípica para su edad. Connecting Musicians Project, integrado por precoces músicos de diversos puntos de España, demostraron ayer que, la cantera musical de la Orquesta Ciudad de Almería (OCAL), vive y siente cada nota como la mejor de las medicinas para curar el silencio, el mejor de los deportes para sentirse saludable y el camino a seguir en el horizonte para consolidarse como grandes músicos.
La fusión, compenetración y la creación de una atmósfera creativa envuelta en obras como Palladio, de Karl Jenkins, hicieron que las miradas y las mentes de los espectadores navegasen las aguas de la tormenta al son que marcaba la batuta de Michael Thomas y Connecting Musicians. Sin duda, fue una velada de lo más agradable. Un tercer concierto de este proyecto musical de la OCAL en el que los jóvenes músicos han mandado un mensaje: han venido para quedarse.
El concierto resaltó que unir música, medicina y deporte es posible. Así lo demuestra la Orquesta Ciudad de Almería (OCAL) a diario con su compromiso con los almerienses y sus, cada vez más frecuentes, colaboraciones con el Hospital Universitario de Torrecárdenas.
Michael Thomas
La dirección estuvo bajo la batuta del maestro Michael Thomas, considerado un gurú de la música, su visión global del arte y su inquietud por profundizar en la esencia de otros estilos musicales, le han llevado a colaborar con artistas de muy diversa índole: Elvis Costelo, Paul McCartney, Björk, Kiko Veneno, Ian Carr, o Raimundo Amador, lo cual ha forjado un sello muy personal en su forma de entender la música y en su lenguaje como intérprete.
Connecting Musicians Project
Es una iniciativa que la OCAL viene trabajando desde el pasado mes de julio, en el que se llevó a cabo el Curso de Evolución Instrumental dirigido a los jóvenes instrumentistas que querían vivir una experiencia única y evolucionar técnica e interpretativamente con su instrumento. La formación fue todo un éxito con alumnos de todo el mundo y profesores de alto nivel musical que también aterrizaron en Almería procedentes de diversos países, como Dimitri Ashkenazy o Peter Schöening.
Los jóvenes músicos han concedido dos conciertos desde la finalización del curso: el primero en el Claustro de la Catedral de Almería, en julio, y el segundo en el Conjunto Monumental La Alcazaba de Almería, ambos con un exitoso resultado para poner en práctica lo aprendido y desarrollarse como músicos.
