La #NavidadatuGusto programada por el Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería también tiene espacio para el arte. Por ejemplo con la nueva obra invitada, consolidada sección ya del Museo de Arte de Almería ‘Doña Pakyta’, donde se podrá disfrutar hasta el próximo 22 de enero de la obra de Jesús de Perceval ‘La Sagrada Familia’. La concejala responsable del Área ha destacado “la especial relevancia que tiene tanto el autor, uno de los pintores más importantes del arte almeriense, así como la elección de la obra, muy propia para estos días de Navidad”, ha dicho Ana Martínez Labella.
Por su parte, el director del Museo, Juan Manuel Martín ha destacado “el fuerte simbolismo que tiene la obra, con el pan sobre la mesa o las cruces del monte Calvario al fondo. Además de la normalidad de los padres del niño Jesús, pues podrían pasar como campesinos almerienses de principios de siglo pasado”.
Sobre la obra
‘La Sagrada Familia’ es una obra colorista y luminosa de claras influencias mediterráneas, hermanada con las propuestas plásticas de Zabaleta y Vázquez Díaz, aunque en esta Sagrada Familia recurrió Perceval a la iconografía tradicional, representando al Niño Jesús rodeado de su familia terrenal –la Virgen María y San José–, en la misma hizo gala el artista almeriense de la modernidad que caracterizó su producción. Una apuesta personal que le llevó a convertir la acostumbrada representación religiosa en una escena doméstica en la que el símbolo adquiere notable importancia.
Composición equilibrada, de dibujo definido y ricos matices cromáticos, a la izquierda, María cubre su pelo con el típico pañuelo mojaquero que cae sobre su hombro desnudo; a la derecha se sitúa San José, con sombrero de paja, camisa blanca y faja roja, cual campesino andaluz. En el centro de la escena, sobre una modesta mesa rodeada de sillas de enea y centrando todo el interés de la obra, el Niño Jesús se alza posando su pie sobre una hogaza de pan, símbolo de la Eucaristía.
Al fondo del paisaje poblado de verdes olivos, en la cima de la montaña azul que aparece sobre la cabeza nimbada del Divino Infante, tres cruces recuerdan alegóricamente el destino final de éste y conceden a la obra un profundo sabor popular, como recuerdo de los “calvarios” que, fruto de la religiosidad popular andaluza, poblaron nuestra geografía rural.
Realizada en 1956, esta Sagrada Familia presenta especiales vínculos —visuales, formales y temáticos— con las siete escenas que configuran el retablo de la parroquia de Nuestra Señora del Rosario de Roquetas de Mar; una obra finalizada por Perceval en 1957.
Sobre Jesús de Perceval
Polifacético artista (pintor, escultor, constructor de retablos, diseñador, imaginero, orfebre, alfarero, fotógrafo…) y controvertido e inquieto intelectual, Jesús de Perceval fue el verdadero motor intelectual y aglutinador del Movimiento Indaliano. De hecho, para la mayoría de críticos y estudiosos es casi imposible desligar la evolución del Movimiento Indaliano de la del propio Perceval. Formado inicialmente en la Escuela de Bellas Artes de Almería, continuó su formación en la Escuela Superior de San Fernando, en Madrid, y posteriormente en el extranjero, gracias a una beca concedida por la Diputación provincial y el Ministerio del Estado Español. Presente en numerosas muestras nacionales e internacionales, en 1936 exponía el cuadro Ha muerto un hombre en la Exposición Nacional de Bellas Artes. A pesar de sus numerosos éxitos artísticos fuera de nuestra provincia, Perceval siempre estuvo vinculado a Almería.