En Roquetas de Mar se viene demandando la disolución de la Ejecutiva Local del PSOE tal y como se ha procedido en Huércal-Overa, donde la motivación ha sido más leve que lo que viene ocurriendo en la localidad del Poniente y resulta incomprensible que la Ejecutiva Provincial en bloque apoye a la actual dirección local roquetera de la que se ha dimitido una concejala y el próximo lunes día 24 de abril, a las 10 hrs, tendrá un acto de conciliación en la Sala de los Social Nº 1 de Almería.
La vistilla no tendría importancia si no fuese porque existen antecedentes que no debería poseer cargo público alguno, pese a tratarse de un asunto laboral en su actividad profesional, antecedentes con unas consecuencias que han condicionado la vida personal y profesional de la persona afectada, en tanto que una de las personas sobre las que recae la corresponsabilidad de haberlas provocado le ha servido para medrar políticamente.
El asunto es de tal envergadura que aumenta su gravedad por la personalidad política del concejal demandado y haberse dado la circunstancia de que se le atribuye el haber sido el principal inductor de la crisis que ha provocado la salida del Grupo Municipal Socialista y del PSOE de la Secretaria Local de Organización y uno de los dos pilares que consiguieron aupar a la Secretaría General a Manolo García tras la Moción de Censura a Juan Miguel López.
Por último cabe reseñar que cuando se incorporó María José López Carmona al Grupo Municipal de No Adscritos previo al pleno en que se formalizó el abandono del GMS el portavoz solicitó por escrito una dedicación exclusiva para el concejal Ibáñez Padilla, petición que fue retiirada en la última sesión plenaria tras haber intentado verbalmente conseguirla el portavoz.