La suma de un químico sevillano y de una horchatera valenciana ha dado como fruto la Heladería Artesanal Neptuno, que el pasado mes de abril abría sus puertas en Aguadulce.
Se distinguen por disponer de una carta de elaboración propia, endulzar la vida a los demás y solicitar a la clientela que si no encuentran el sabor del helado que buscan se lo hagan saber para elaborarlo cuanto antes. Allí se puede degustar una espectacular copa de veinte bolas, con los sabores que cada uno desee.
Una copa a la carta, que es uno de los lujos que diferencian al establecimiento en su variada oferta. Otra de sus especialidades es la leche merengada, como explica Antonio Fernández , quien recuerda que “la familia de mi mujer lleva cuarenta años haciendo leche merengada. Soy químico de profesión, me casé con una horchatera valenciana y me convenció para meterme en el mundo del helado. La Copa Neptuno viene a ser como unos dos kilos de helado y la persona sale de aquí muy satisfecha después de probarlo. Es especial para compartir entre varias personas. Le decimos al cliente que elija diez sabores y además le damos uno de propina. Solo vale diez euros, que entre varios es muy poco, y acabas harto de helado y disfrutando con los amigos. Vienen muchos estudiantes a tomarla. Esta copa es un emblema nuestro porque queremos que la gente coma helados como alimento”, mantiene Antonio.
Además la carta presenta una infinita variedad de sabores, todos elaborados de forma artesanal y con productos naturales, así como variedades para enfermos diabéticos, celiacos, etc., porque lo natural es lo que prima en esta firma comercial que acaba de establecerse.
En Heladería Artesanal Neptuno puede encontrar desde la leche merengada, vainilla, o chocolate sin azúcar, al helado de higos, de mango, de tarta al whisky, trufa italiana, mojito eaborado con ron, limón y hierbabuena, tiramisú, ferrero rocher, sandía… así hasta más de sesenta sabores diferentes. Todo un lujo para los sentidos que se elaboran alli por esta empresa eminentemente familiar.
“Intentamos sacar todos los años un sabor nuevo. Por ejemplo el helado de bailey empezamos a hacerlo aquí, o el de brownie, que es una crema de chocolate con nueces y bizcocho de chocolate, un pecado irresistible. Aquí lo hacemos todo natural y el helado de fruta se hace con fruta de verdad. Se nos ocurren ideas, como la tarta de manzana. Si se te ocurre un helado nos lo dices y lo hacemos”, afirma quien defiende disfrutar el helado casi como una filosofía de vida, “porque el dulce es el primer sabor que reconoce un recién nacido, el dulce, el azúcar, la glucosa es la gasolina del cuerpo. Ahora mismo hay mucho interés por eliminar el dulce. Hay una industria alimenticia y farmacéutica intrernacional con grandes intereses económicos que están adulterando por completo lo que es la alimentación sana y natural. Tenemos muy mala información alimenticia. Hay que volver a los productos naturales como los frutos secos, etc. Aquí llevamos poco tiempo y estamos muy satisfechos y muy a gusto. Estamos trabajando muy a gusto. Queremos que la gente venga a conocernos y estamos abiertos a cualquier cosa”, invita el responsable de una heladería que seguro va a hacer las delicias de miles de personas en el inminente veraneo de Aguadulce.
Heladería Artesanal Neptuno pone a disposición de todos una experiencia de 30 años en la elaboración de helados y horchatas con origen en una tradición familiar. Además dispone de precios muy asequibles y un local en pleno centro de Aguadulce, en el que puede comprar sus sabrosos, naturales, fresquitos y originales productos al ir o volver de la playa, o para llevar a casa y disfrutar con los amigos, o quizá prefiera sentarse en la terraza del local para saborearlo en una calurosa noche.