La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF Almería, critica el sistema de reparto del Complemento de Rendimiento Profesional del Servicio Andaluz de Salud en la provincia y considera reprobable que sean los propios responsables o jefes de servicio los encargados de distribuir la productividad siendo ellos los que más retribuciones económicas perciben por este concepto. Ante esta situación, tal y como señala CSIF, los trabajadores sienten un año más una gran indignación e impotencia por la deficiente gestión del CRP por parte del SAS.
Según los datos que maneja el sindicato, hay jefes de servicio que, por este complemento, están recibiendo hasta 12.000 euros, mientras que el resto de trabajadores de la misma unidad están percibiendo cantidades que rondan los 400 euros por el mismo concepto. Por eso, para CSIF no es de recibo que los propios evaluadores del cumplimiento de objetivos que se establecen para el reparto de la productividad sean participantes de la distribución económica de la misma, puesto que son cargos de responsabilidad que ya perciben por el desempeño de sus funciones la cuantía correspondiente en su nómina.
Así, el Complemento de Rendimiento Profesional se establece en base a dos criterios, un 40 por ciento fundamentado en la consecución de objetivos individuales que evalúan, entre otros aspectos, el ahorro en recetas, la prescripción de medicamentos genéricos o la economización de pruebas diagnósticas. El otro 60 por ciento restante se mide a través del alcance de objetivos de equipo fijados en puntos como el ahorro en sustituciones por motivos de baja o vacaciones, el cumplimiento del menor número de derivaciones de pacientes o la capacidad resolutiva de patologías, entre otras. Así, este año, según ha podido saber el sindicato, los objetivos han sido totalmente desconocidos, lo que ha producido falta de participación de los profesionales por desconocimiento y ha supuesto que no se haya podido llevar a cabo la evaluación y sin embargo si reparto arbitrario de este concepto retributivo.
Asimismo, el cobro de este complemento no es proporcional con las diferencias existentes en el salario base ya que en algunos casos está multiplicado por el 300%, fijando así importantes agravios para unos y sobresueldos para los directivos.
Con todo, tal y como explica Moreno, la opacidad de los estos listados, también ahonda en la insatisfacción que este sistema de reparto está generando entre los profesionales. “Este año, el SAS ha llegado a prohibir a los sindicatos expresamente la publicidad de dichos listados de reparto, con la amenaza incluso de sanciones graves por la aplicación de la Ley de protección de datos y desde CSIF nos preguntamos por qué este hermetismo”, puntualiza el responsable sindical.
Por todo ello y para evitar estas suspicacias y estos mecanismos que sirven para enriquecerse ellos mismos, desde CSIF exigen que estos responsables o directivos no participen en la distribución del complemento de productividad puesto que ya todos los meses estos cargos ven reflejado en sus nóminas el desempeño de sus funciones.