CSI-CSIF considera necesario que el sistema educativo andaluz, y más concretamente, el almeriense, den un salto de calidad, que se debe plasmar en la preparación y cualificación de los alumnos y en la mejora de la condiciones laborales del profesorado.
Estando de acuerdo y compartiendo la necesidad de que la educación llegue a todos en condiciones de igualdad, esta premisa no puede quedar en una declaración de intenciones y esa igualdad se debe plasmar en una verdadera política de mejora de los centros educativos, de la oferta de servicios como el transporte y los comedores escolares y de plantillas. El debate no puede ser si queremos una educación para todos y educación de calidad para unos pocos, la apuesta y el objetivo debe estar claro: educación de calidad para todos.
Así mismo, para CSI-CSIF resulta muy importante la potenciación del plurilingüismo y de las tecnologías de la información, aunque discrepa de cómo se está haciendo, pero no deben ser utilizadas por la Consejería como cortina de humo para ocultar problemas graves como el fracaso escolar, la convivencia en los centros, agresiones al profesorado, que afectan de una forma decisiva a la calidad de la enseñanza y a las condiciones de trabajo del profesorado.
CSI-CSIF considera innegables, e inalienables, los derechos del profesor a trabajar dignamente y del alumno a aprender en las mejores condiciones. Es por ello por lo que considera imprescindible que urgentemente, en este curso 2005-2006, se aborde el tema de convivencia en los centros educativos andaluces.
Para ello es necesario que Educación abra el debate y el diálogo con las organizaciones sindicales, de padres y de alumnos, con el objetivo de consensuar medidas que erradiquen o minimicen los problemas de convivencia en los centros. En este sentido, CSI-CSIF ya propuso antes del verano en el Consejo Escolar de Andalucía, que se abriera un debate sobre los problemas de convivencia escolar y los actos de violencia en los centros educativos y hoy este sindicato se puede congratular de que esta petición haya sido atendida y que ya se hayan iniciado los trabajos en el seno de dicha Institución.
Precariedad del empleo
El curso 2005-2006 empieza con un problema endémico, la alta precariedad en el empleo en el sistema educativo. Más de 17.000 profesores interinos y sus familias viven una situación de intranquilidad e incertidumbre ante su futuro profesional. A este problema hay que darle una solución ya y este es el momento adecuado, dado que el Proyecto de Ley de Educación se encuentra en trámite parlamentario.
Un tema novedoso es la gratuidad de los libros de texto, aspecto que se valora positivamente desde CSI-CSIF, pero este sindicato no comparte la forma en que se pone en práctica, porque supone una asignación de funciones al profesorado y aumento de trabajo que no se ve plasmado en ninguna mejora.
En este nuevo curso por primera vez se ha hecho una colocación de profesorado en situación de provisionalidad por dos años, decisión tomada unilateralmente por la Consejería sin el apoyo sindical. El argumento de la Consejería es la estabilización de las plantillas, argumento falaz porque la verdadera estabilización de las plantillas y de los equipos educativos se hace con buenos concursos de traslados y disminuyendo drásticamente la precariedad en el empleo.
Inevitablemente en este inicio de curso hay que hacer referencia al Proyecto de Ley que se encuentra en el Parlamento, una Ley hecha a espaldas del profesorado, que no recoge mejoras en las condiciones laborales y retributivas del personal docente y que, entre otras cosas, no es fruto de un Pacto de Estado como demanda la mayoría del profesorado, ni viene acompañada de algo fundamental como es una Ley de Financiación. Más de 80.000 profesores y millones de ciudadanos esperan soluciones a los problemas de la educación en Andalucía. Es una obligación de la Administración darles respuesta.