Desde una observación objetiva comprendo que el mejor régimen social es la democracia. El que todos los españoles nos hemos dado, el ideal para crear un SISTEMA OCUPACIONAL o la NACIONALIZACIÓN DEL TRABAJO (así los denomino) para no dejar a nadie atrás o abandonado.
Considero que la Sociedad, el Estado, por sus medios o los que designe, ha de velar por todos sus ciudadanos en cualquier circunstancia. Procurará la prosperidad a las personas (físicas y jurídicas) a fin de evitar sus miserias, penurias, pobrezas, analfabetismos, injusticias,…, la intolerancias y sinrazón que, a veces, el poder ejerce y, para ello, la autoridad competente habrá de tirarse al barro, fajarse, codearse y tratar con todas y cada una de ellas.
Esto se consigue conociendo a la totalidad de esas personas: sus situaciones e insuficiencias, sus inquietudes y deseos… y, especialmente a la gente de carne y hueso que está en paro y sin ocupación. Se deberá examinar su estado físico y mental, su necesidad económica y posibilidades, su cualificación y aptitudes. Se abordará a nivel local (por barrios, distritos, aldeas, pueblos, municipios, ciudades) un sinfín de relaciones: clasificándolos, cuidándolos, ocupándose de todos y asignándoles una actividad. En eso consistirá la primera y segunda medida: 1- Base de datos actualizada. 2- Ocupación de todas las personas en condiciones de poder trabajar. (Motivo de otro tratamiento especifico e independiente, serán los incapacitados, enfermos crónicos, dependientes…
Los costos que origine así como los ingresos que reporte el SISTEMA OCUPACIONAL corresponderán al Estado, con dos finalidades principales: Exterminar el desempleo y con ello gran parte de la pobreza y Producir beneficios físicos al Estado paliando su déficit.
Se encomendará un trabajo obligatorio a todos cuantos carezcan de él, previo compromiso y conformidad de los mismos, al margen de las ayudas o privilegios que, en su caso, reciban hasta ese momento, cumpliendo todas las exigencias laborales exigibles (horarios, horas de trabajo, puntualidad, comportamiento, sueldos justos –en rama o en especie para procurarles alimentación, cobijo, vestimenta, educación y dignidad-). Será un trabajo globalizado en toda España que dará comienzo en la oficina de empleo más próxima al lugar de residencia del ocupado/trabajador, hasta adaptarse al perfeccionamiento del Sistema a nivel nacional, en cuyo momento, se realizará allá donde sea preciso por campañas y épocas, demandas y oportunidades, siempre por supuesto, ordenando que cada lugar tenga cubiertas debidamente las necesidades básicas de habitabilidad.
El SISTEMA OCUPACIONAL o NACIONALIZACIÓN DEL TRABAJO que se pretende, puede ser muy amplio y ambicioso, afianzándose poco a poco para beneficio de la sociedad en su conjunto. Anulará el paro, la pobreza, la mendicidad… sin violentar a quienes ahora las soportan. Llegará un momento en que con ello haya un solo contrato de trabajo, el despido libre sea un hecho, los sindicatos de empresarios y trabajadores tendrán menor protagonismo, los enchufes no serán aceptados, el esfuerzo y la preparación serán los valores para alcanzar metas y la vida será para vivirla siendo una buena persona con aspiraciones a trabajar en lo que te apasione…
Lo planteado no es una entelequia como en su día no lo fue la puesta en marcha de la Escuela o la Sanidad pública, la Seguridad Social, los Funcionarios y otros mediadores que dejaron de ser autónomos o trabajadores explotados. Será, sin duda, riqueza social: abolir el desempleo, la mendicidad, la precariedad laboral, los abusos que en ella se producen, las injusticias sociales… y rebajar el déficit aumentando el P.I.B. y obteniendo beneficios.