“Vamos a recordarlo con una fiesta, con música, que es como a él le hubiera gustado”. Así daba la bienvenida Salteños al público congregado ayer para el que, a buen seguro, habrá sido uno de los conciertos más emotivos y vibrantes del grupo en sus casi cuarenta años de historia, si incluimos los primeros años de esa experiencia primera que fueron Quiaqueños. El Auditorio Municipal Maestro Padilla registró una magnífica entrada para presenciar la actuación del grupo almeriense con la que presentaban oficialmente su quinto disco, ‘Sencillamente Salteños’, y rendían homenaje a Indalecio López Gázquez, compañero desde 1991 y fallecido en el pasado mes de octubre.
La velada, que contó con la colaboración del Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería, comenzó con una sentida presentación a cargo de José Escánez Carrillo, amigo histórico de Salteños y buen conocedor de todos los avatares experimentados por la formación.
Cerca de cuarenta años de experiencia y compartir escenario con grandes como Jorge Cafrune, Quilapayun, Olga Manzano y Manuel Picón o Mercedes Sosa avalan la calidad de Los Salteños, que volvieron a hacer de perfectos ‘guía de viajes musicales’, recorriendo la tradición del folklore más añejo y con mayor poso de Hispanoamérica. Bolivia, Argentina, Perú o México, unión de pueblos por el canto popular en el repertorio de un grupo formado por José Antonio García Polo, Germán Alonso, Miguel García Hernández y José Javier Martínez Gallardo, que estuvo apoyado también por la batería de Manuel Mañas y por los teclados de Pablo García. Además, contaron con las colaboraciones de Sergio Núñez en la primera parte, y de Chochi Duré y el flautista Sergio de Lope en la segunda.
Instrumentales como ‘Canto Cuculi’, con aires andinos, ‘Taquirari Camba’, ‘Candomé de un bailaor’, una triple zamba argentina con ‘Mi Esperanza’, ‘Cancionero’ y ‘Angélica’ o el son jarocho de Veracruz ‘El Cascabel’, chacareras como ‘Amargura’, la participativa ‘Todo Cambia’ o la ‘Milonga de la Riqueza’ hicieron las delicias de un público que, además de demostrar una fidelidad inquebrantable a Salteños a lo largo de los años, anoche mostró un extra de cariño en el recuerdo de los ausentes.